Capitulo IV

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   Era la tarde de aquel mismo día, Jorge estaba sentado escribiendo en una mesa que estaba en el jardín trasero, escribiendo quién sabe qué, Estéfani se acercó lentamente hacia él, mientras su padre trabajaba en algo con unos pedazos de madera y sus herramientas.

   —¿qué haces?

—escribiendo un poema.

—¿puedo leerlo?

—no, ahora vete déjame concentrarme.

—esta noche es la fiesta.

—¿que fiesta?

—la de Kate.

—ah sí, a la que no irás.

—claro que sí. ¿Crees que me de permiso?

—¡por supuesto que no!

—entonces ¿podrías ayudarme?

—¿a fugarte? ¿Yo? ¡Claro que no!

—oye, yo siempre te apoyo.

—¿en qué?

—bueno, si alguna vez necesitas mi ayuda, podría ayudarte.

—¿podrías?

—está bien, te voy a deber una, lo que sea.

—muy bien.

—¡ay! Te amo hermanito.

   La sonrisa de Estéfani era enorme, estaba completamente feliz, era lo más arriesgado que iba a hacer en toda su corta vida.

—oye papá, Estef quiere irá a una fiesta en la noche.

—oye, ¿qué haces? Dijiste que me ayudarías. —le murmuró

—y lo haré —le contestó por lo bajo

—¿dónde es?

—en casa de Kate.

—solamente si me prometes dos cosas.

—¡¿oye, papá, la dejarás ir?!

—claro papá lo que me pidas. Cállate Jorge.

—que no irás es una de las condiciones.

—ya deja a tu hermana, Jorge.

—sí, cállate.

—la primera es que te acompañe tu hermano.

—de ninguna manera, —gritaron los dos.

—y la segunda es que nomas algún idiota quiera comportarse como lo que es, como un idiota contigo te vienes.

—¡está bien!

   Estéfani sabía que su padre no iba a cambiar de opinión y que sus condiciones eran fijas, que no las cambiaría, así que pensó rápido y acató las dos “ordenes” que le había dado.

   —ven, vamos Jorge llegaremos tarde.

—oye papá y que hay sobre el alcohol.

—¡cállate, hermano!

—solo un trago.

—como digas, —dijo decepcionada pero feliz.

   Subió a vestirse, lo hizo rápidamente y bajo a esperar a su hermano, al ver que no bajaba decidió subir a su habitación. Así lo encontró tumbado en la cama.

—oye, vamos, se nos hace tarde.

—¿por que quieres ir? ¿Por qué hoy? Tus amigos hacen fiestas casi todos los días.

EL AMOR EN LA ESQUINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora