TRES AMIGOS SOBRENATURALES

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- Bien, todo listo. Creo que voy a... ¡Ups! Se me han acabado las semillas... Iré a comprar algunas en la tienda de Miranda.- dijo Nanami al acabar de hacer sus tareas.

Cuando llegó al Sur de Westown escuchó unos sollozos de una niña. Era la hora de la siesta, y en esas horas de descanso resultaba raro encontrar gente por allí.

- ¡Buaaaaaaaaaaahhh! ¡No me sale! ¡No me sale! ¡¡Buaaaaaaaaaaahhh!! -

- ¿Eh? - Nanami miró a todos lados y no vió a nadie.

- ¡¡DESSIE LLORICA, DESSIE LLORICAAA!! - dijo otra voz burlona de una chiquilla.

- Dama Dessie, Dama Witchie... No hace falta alterarse por tal nimiedad.

Entonces los vio. Había tres personas delante del estanque y la cascada de la zona.
La que parecía más pequeña y estaba cubierta en lágrimas, tenía un largo pelo verde recogido en unas trenzas y flores decorativas alrededor. La otra que se reía, tenía unas coletas pelirrojas anaranjadas y un curioso disfraz de bruja. Y el tercero... O tercera... No sabía si era chico o chica. De hecho, no sabía si era humano. Tenía el pelo blanco como la nieve, largo y en la parte superior, unas grandes orejas de zorro. También tenía una cola peluda, como la de un perro. Vestía un yukata japonés blanco con bordados dorados.

Nanami no sabía que pasaba allí, ¿acaso era Halloween y no se había enterado? Se acercó a curiosear y a preguntarle a los chicos si les ocurría algo.

- ¡¡DESSIE LLORI..!! ¿Ca? ¿Y esta por qué nos mira?- dijo la Brujita.

- Es una mortal...

- Claro que soy una mortal, como vosotros. - respondió un poco ofendida por la actitud del chico-zorro.

- ¡¡NOS ACABA DE HABLAR!! - dijo la del pelo verde.

- ¿Acaso no puedo hablaros? - preguntó aún más molesta.

- ¿Puedes vernos?

- ¡¡Venga ya!! ¿Qué es esto? ¿Un cachondeo? ¡CLARO QUE PUEDO!

- Cálmate... Te lo explicaremos. - dijo el zorro. - Ella es Dessie, la Deidad protectora de Westown.

- ¡Hola! ¡Vivo aquí, en el Pantano! - saludó la del pelo verde.

- Ella es Witchie, la deidad protectora de Lulukoko, se encarga de...

- ¡¡EH, EH, EH!! ¡Quieto ahí! YO no soy deidad protectora de nadie. Soy la Bruja Malvada que se encarga de hacerle la vida imposible a los residentes del pueblo. Todas las desgracias que ocurren son gracias a mí. Doy mala suerte, MUAJAJAJA. Y también soy la más mona de la región. Vivo dentro de las ruinas de Lulukoko~ - dijo la del pelo naranja.

- Y yo soy Inari. La deidad protectora de Tsuyukusa. Me puedes encontrar en las puertas del templo.

- ¿Va... Va en serio?

- ¡Pues claro! ¿O quieres que te lo demostremos? (Cada demostración 100 G) De todas formas, me alegro de conocer a alguien nuevo~ Llevo ya 100 años viendo las mismas caras... - dijo Witchie.

- ¿¡100 AÑOS!? No lo aparentas...

- ¡Eh! ¡Mira al chico ese de ahí! - gritó Dessie. - ¡Ya sé como hacer que entres en razón, Nanami!

- ¿Qué vas a hacer? ¿Y cómo sabes mi nombre?

- Las deidades lo sabemos todo~. Espera y verás. - Dessie corrió hacia al que parecía... ¿¡FORD!?

-¡¡DESSIEEE!! ¡PARA! ¡SI ESTO ES UNA BROMA Y SE ENTERA LO PASAR...!!- no pudo terminar la frase porque Inari le tapó la boca y hizo que se agachara detrás de un arbusto.

- No grites. A tí te escuchará, dama Nanami. A nosotros no. No quiero que él crea que hablas sola o estás loca.

- ¡¡HEEEEEEEEEEYY!! ¿QUÉ TAL BUEN HOMBRE? - saludó Dessie a Ford. Para sorpresa de Nanami, él ni se inmutó. Siguió con su búsqueda de hierbas medicinales. Como si nada hubiera pasado.

Dessie pateaba con sus pequeñas piernecitas a Ford, le gritaba en la oreja, se subía en su espalda...

- Vale, vale, ya os creo. Gracias por la demostración.

Estuvo charlando un rato más con sus nuevos amigos.

- Es curioso... - murmuró Inari. - Solo algunos niños pequeños pueden verme... ¿Pero una adulta como tú? Me gustaría saber el por qué de esto...

- A mí también...

- ¡El "por qué"! ¡JA! Solo os interesais por las cosas aburridas. Yo creo que es cosa de la vida, pura suerte. Nos ves y hala. - dijo Witchie.

- Y bueno... Se supone que sois deidades... ¿No tenéis ningún poder especial?

- Hombre claro, ¿por quién me tomas? Soy la super bruja hija de la Bruja más poderosa de todas las brujas que hacen brujería. Si me traes un regalito, cualquier cultivo de Lulukoko, haré que tu aspecto cambie o que la gente se enfade contigo. También puedo molestar a ese vecino que tanto odias, como muestra de nuestra amistad, je, je.

- Yo uno el alma de una mascota y su dueño. Si tu mascota y tú os lleváis maravillosamente, puedo hacer que vuestra relación aumente a un nivel superior. Como mejores amigos. Os entenderéis a la perfección. - contó Inari.

- Y yo... Bueno, yo... - dijo Dessie con lágrimas en los ojos. - Yo hago magia. ¡Pero los hechizos nunca me salen! ¡Soy una inútil!

- Dessie no llores... Tú no eres una inútil... - la consoló Nanami.

- Dice la verdad... No sabe convertir una planta en fresa...

- ¡Dama Witchie! ¡No ayudas!


- Nami... ¿Con quién hablas? - preguntó una voz.




Comentario de Andrea: Os dejo aquí con la intriga xD. Dale a la Estrella y comenta!!

Nos vemos en el próximo capítulo!!

Y aquí os dejo una foto de estos tres (por orden):
Witchie
Dessie
Inari

Los dibujos no son míos, lo dejo claro. Este de aquí arriba pertenece a Nerdtokwa. Tiene una cuenta en Tumblr y os recomiendo que os paséis a ver su arte.

Y el del inicio es sacado del juego.

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