-Mia, si quieres podemos quedar para revisar los temas –me ofreció Jessie.
Estaba bastante estresada ya que era ahora cuando llegaban a acumularse todos los examenes, y yo no era de las personas que me consideraba lista, sino estudiosa, para sacar algo tenía que esforzarme en conseguirlo, y si quería sacar buenas notas... tendría que quedarme hasta las tres de la madrugada estudiando. Era la cruel realidad.
-Por favor –fue mi respuesta.
Deseaba que pudiera ayudarme con todo lo que tenía que estudiar. Ella si era una chica lista, y no le costaba nada sacar buenas notas, y si pudiera sacar ventaja de que era mi amiga podría explicarme todo aquello que no entendiera. Que prácticamente era todo.
-¿Quieres venir a mi casa después?
La verdad es que la pregunta me había chocado, solo por el hecho de que llevaba aquí alrededor de un año y todavía no había ido a su casa, y se podría considerar de las únicas amigas que tenía aquí, por lo menos la más cercana. Todas las veces que nos habíamos quedado en una casa era en la mía, siempre había tenido la pequeña sospecha que no quería acercarme a su hermano, algo que él le pudiera haber dicho o algo parecido, realmente no sabía por lo que era, pero la cuestión es que nunca había ido.
-Me encantaría. –dije con una sonrisa.
Estábamos en mitad del parking esperando a que llegara el coche de mi hermano.
A los diez minutos apareció por la puerta y se colocaba delante de nosotras para que subiéramos. Yo me subí en el asiento delantero y ella en la parte de atrás.
-¿Qué tal el día? –preguntó mi hermano cuando subimos y arrancó el coche.
-Mortal. –respondí con total sinceridad.
-Hola Jessie –le dijo Mark a Jessie.
-Hola, Oliver –respondió mi amiga, con una sonrisa de oreja a oreja. Me encantaba que Jessie estuviera cerca de mi hermano, ya que por lo que fuera le entraba mucha vergüenza y parecía incluso tonta, sabía que no le gustaba, en más sabía lo mucho que le gustaba Connor, pero posiblemente fuera que impusiera que fuera guapo, ¿para qué mentir? Mi hermano era guapo, muy guapo. Y si no fuera mi hermano fantasearía con él, pero siendo su hermana encontraba bastante repugnante. Aunque en verdad, no sabía que pudiera ser, ya que su mellizo –Marcus- también estaba bien.
-Tienes que acercar a Jessie a su casa.
-Dime donde tengo que ir.
Jessie le dijo la dirección y donde podía aparcar y mi hermano se fue por donde llegaría antes.
-Es que ha perdido el autobús por mi culpa. –añadí.
-Vaya amigas te echas –dijo hablando con mi amiga, refiriéndose a mí.
-Pues tú tienes la mala suerte de que me tienes como hermana.
-Por eso yo no puedo huir... Hazlo tu que puedes, Jessie, que se te buena chica.
Le di un puñetazo pequeño en el brazo y luego solo se escuchaba la risa de mi hermano en el coche y a Jessie intentando reírse disimuladamente.
-Perdona, pero tenerme de hermana es como tocarte la lotería.
-Di que sí.
Al rato llegamos a casa de Jessie, si sabía como era por fuera, muchas veces le había acompañado, pero en ningún momento había entrado. Antes de que se fuera a la puerta de su casa se acercó a la ventana del copiloto, yo la baje porque sabía que quería decirme algo.
-Puedes venir a la hora que quieras, estará la casa sola.
-Bien.
-Adiós –dijo alejándose- adiós, Oliver, gracias por traerme.
ESTÁS LEYENDO
Secrets
WerewolfCrystal Jones lucha día a día por seguir adelante. Tiene que vivir la vida bajo un padre el cual la maltrata, al igual que al resto de su familia. Un día todo aquello cambia y sin que nadie le pregunte, tiene que comenzar de cero, olvidar todo aquel...