››Secretaries‹‹ | Johnlock

VIII

—Así que es tú hermano.

Una vez a dentro de la oficina John tomo asiento en el piso recargándose en la pared cerca del escritorio, Sherlock le daba la espalda recargado en su pecho.

—Era lo mas obvio. Soy un Holmes... Él también es un Holmes...

—Sí... Era lo más obvio, ¿también sabes hablar varios idiomas?—Olfateo su cabello.

Otra fantasía anotada.

—Un poco, El francés, alemán y japones, no son difíciles... —se encontró con la mirada de John sonriendole.

—Has estado muy tranquilo a pesar de estar en celo, bonito.

—Estoy acostumbrado, aunque... A veces suele ser doloroso...—giro su cuerpo sentándose en el regazo de John.

—¿No tenías a nadie quien te quitara el dolor?—olfateo su cuello, Sherlock empezaba a temblar y jadear.

—Un dildo no ayuda ¿sabes..?—empezó a menear sus caderas sobre el miembro ya erecto de John.

—Eres jodidamente hermoso...

A Sherlock no le dio tiempo de responder a eso John lo atrapó entre sus labios.
Sherlock apoyaba sus manos en los hombros del mayor, mientras el contrario manoseaba cada parte de su lindo y delicado cuerpo sacando unos cuantos jadeos comenzando a lamer su cuello.
John llevo una de sus manos a la boca del Sherlock haciendo que callará.

—Shh... Guarda silencio, no queremos que nadie escuche... ¿verdad? —desabrocho despacio la camisa del menor sin quitarle la vista.

John opto por acostarlo en la alfombra que tenia bajo su escritorio, posicionó las piernas de Sherlock a lo alto de sus hombros, el exquisito olor que tanto amaba empezaba a desprenderse al igual que el suyo.

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—Así que decidiste dejar la carrera de leyes para trabajar en una empresa de moda. —dijo Mycroft tomando asiento nuevamente.

—...John me pidió ayuda, no podía decirle que no, es mi mejor amigo después de todo, ¿Té?—Le ofreció sentándose enfrente de él.

—Te lo agradezco. — bebió del vaso.—¿Es a lo único que te dedicas?

Lestrade dio un sorbo rápido antes de responder.
—No. A veces salgo con personas de la universidad... Después de que te fuiste algunos me apoyaron incluyendo a John y los considero mis amigos... Ellos confían en mí para contarme cosas ¿sabes?

Mycroft podía notar el sarcasmo en las palabras que escupía Lestrade.

—Si no te lo dije fue por algo, Greg.—agregó más azúcar a su té.

—Ni siquiera una carta, en verdad no te molestaste en mandarme una ¡SIMPLE CARTA!—avento un folder con documentos al piso, Mycroft siguió el folder con la mirada.

—Creí que era obvio mi comportamiento contigo, no pensé que te dolería tanto. —tomo por completo su té aplastando el vaso tirándolo al cesto de a lado. Lestrade empezó otra vez a soltar su aroma a chocolate.

—¿En verdad quieres trabajar aquí?, el sueldo es muy bueno pero debes soportar la actitud de John. —habló ya mas calmado.

—Desde luego, si puedo volver a recuperar tu confianza tomaré el riesgo... Greg.— sonrió

—No hace falta, siempre has tenido mi confianza. —le devolvió la sonrisa por respeto. —Aunque no sera fácil, después de lo que me hiciste sufrir...