Lie ✦Kookmin✦

23

JiMin se encontraba sentado con las piernas cruzadas y los ojos cerrados.

— ¿Estás meditando o algo por el estilo?— preguntó NamJoon al verlo.

El castaño frunció el ceño y luego abrió los ojos.

— Estoy recapacitando sobre mi vida.

— Uh... okey... ¿sucedió algo?— se atrevió a preguntar.

— La verdadera pregunta es, ¿qué no sucedió estás últimas semanas?

— ¿Estarás así para cuando hyung llegue? Lo asustarás.

JiMin suspiró y cambió de posición.— Lo siento, me estoy comportando de manera extraña, ¿cierto?

— Bueno, contando que llevas meditando como una hora... un poco.

— Es que... mi vida este año cambió de sobremanera. Ya no sé qué hacer, me siento un fracasado.

— ¿Fracasado?— frunció el ceño a la vez que se sentaba en frente suyo.— ¿Por qué?

— Por amar y extrañar aún a alguien que me lastimó demasiado... por perder todo de un segundo a otro. Ya no tengo más trabajo y falté a los últimos parciales de la universidad. Tengo que dar el año de nuevo.

— Es comprensible JiMin, todo es muy reciente, pero no por eso eres un fracasado. Solo tienes que empezar a vivir tu presente. Todo aquello ya sucedió, ¿y qué? ¿Te quedarás estancado? ¿Eso hará que todo cambie? No, tienes que seguir adelante.

JiMin mordió su labio inferior e intentó aguantar sus ganas de llorar.

— Estoy seguro qué hay algo más que te esta molestando y que tiene que ver con HoSeok.

— ¿Qué? ¿Cómo...?

— El otro día ambos llegaron muy incómodos y completamente rojos. Sé que le gustas, ni lo disimulaba, pero no sé qué sientes tú por él. Como ahora ya no eres tan fácil de leer, no lo sé.

— ¿Qué debería hacer?

— Eso solo lo sabes tú— se levantó.— Sé que tomarás la mejor decisión— dijo para luego alejarse, dejando a un JiMin bastante pensativo.

Él realmente no quería lastimar a HoSeok, sabiendo todo lo que había sufrido y lo noble que su corazón es.

Suspiró y luego se levantó al sentir su celular sonar. Viendo en la pantalla que se trataba de YoonGi.

— ¿Hyung?

— JiMin... te escuchó mejor que la última vez que hablamos.

— Bueno... no puedo seguir así por mucho más.

— Aunque es comprensible, créeme. En fin, te sentirás mucho mejor al saber algo... o al menos eso espero, sino te asesinaré.

— ¿Qué? ¿A qué te refieres?

— Sal afuera y compruébalo— dijo antes de finalizar la llamada.

JiMin miró confundido su celular y luego decidió hacerle caso, aunque no sabía a qué se refería. Se levantó y caminó hasta la puerta principal para abrirla y descubrir el rostro de su hyung al otro lado.

— Buenas, tanto tiempo— levantó su mano.

— ¡Hyung!— exclamó antes de abrazarlo.

— Ya me imaginaba tanta alegría, sé que soy muy esencial para tu vida— correspondió el abrazo con suavidad.

— Te extrañé mucho— levantó el rostro para verlo.

YoonGi hizo una mueca.

— Que asco se te están cayendo los mocos— arrugó la nariz y JiMin rió en respuesta al darse cuenta que no había cambiado en nada.