La Tercera Generación

Pensamientos

Después de comer Dumbledore mando a todos a dormir pues al día siguiente retomarían la lectura.

- Hey Weasley chica- habló James- no dormirás

Ella negó y se dirigió a la torre de astronomía donde Naomí la esperaba.

- Al fin llegas- sonrió Naomí- ven siéntate aquí- le señalo un lugar al lado de ella

Ginny obedeció y se sentó al lado de su amiga Naomí miraba las estrellas mientras que Ginny miraba la luna.

- Ginn- habló Naomí- debemos hablar

La pelirroja asintió levemente y puso atención a lo que su amiga le iba a decir

- He notado como te pones cuando Harry y Cho estan juntos- inicio Naomí- la cuestión es,¿te gusta mi hermano?- a Ginny le sorprendió esa noticia

- No hace falta que me conteste te daré el tiempo necesario para que lo pienses - dicho eso, Naomí se levanto para irse

-¡Espera!- le llamó Ginny nerviosa

Naomí se detuvo y la volteó a ver, recordando como la conoció

A Naomí le sorprendió ser una bruja pero no solo a ella si no que también a sus padres. Asistió a Ilvermony el colegio de magia y hechicería de Estados Unidos donde conoció a Raymundo y Rolf Scamander.

Pero a la mitad de su segundo año sus padres tomaron la idea de vivir en Londres fue doloroso para ella alejarse de sus amigos y vida que tenía hecha en Estados Unidos. Con tan solo llegar sus padres la metieron en Hogwarts lo cual fue una sorpresa pues sus padres no sabían nada más que lo básico del mundo mágico.

-¡Naomí llegarás tarde!- le aviso su madre.

-¡Voy!- Naomí bajo con su túnica puesta y baúl

Minerva Mcgonagall los llevo y guío en Hogwarts y desde ese instante supo que no debía meterse en problemas con ella. Nunca supo de las petrificaciones y sobre el heredó de Slytherin.

-¡Alumnos!- habló Dumbledore- hoy tenemos a una nueva alumna que ha sido transferirá de Ilvermony el colegio de magia y hechicería de América del norte.

Los murmullos aparecieron y ella estaba nerviosa preguntándose cada segundo en que casa quedaría.

- En un minuto entrarás a mi lado- le aviso la profesora Mcgonagall.

-¡Con ustedes Naomí Morgan!

Las puertas del comedor se abrieron y todas las miradas se centraron en ella o quizás era porque a su lado estaba la profesora Mcgonagall.

- Tomé asiento- le pidió Mcgonagall a la niña.

Se sentó en la pequeña silla y le pusieron un sombrero.

Vaya que tenemos aquí a una digna Ravenclaw.

Los de la casa sonrieron deseando que le toqué su casa.

Pero Gryffindor e Slytherin igual entra pero Hufflepuff no se queda atrás. Tu sabiduría, la valentía, el coraje, la inteligencia, tu perseverancia, no temerle al trabajo pesado y tú ambición no es algo que se vea todos los días.

¡Wow! Esto es un momento único no todos quedan en esta casa, perteneces a.....¡Prudens!

Todos incluyendo a los profesores y a Dumbledore se sorprendieron, y de la nada apareció un fénix y se dirigió a la niña

Este se posó en su hombro y canto.

- Bueno pues creo que a todos nos tomo por sorpresa esto- habló Dumbledore- profesora Mcgonagall lleve a la señorita Morgan a mi oficina.

Los tres salieron del comedor. Los minutos pasaron y Naomí llegó junto con la profesora Mcgonagall.

- Señorita Weasley le podría enseñar mañana la escuela a la señorita Morgan- pidió Mcgonagall y se retiró

Naomi se sentó a su lado y le dió una sonrisa.

- Soy Ginny Weasley- se presentó la pequeña

-¿Ginny es tu nombre o un apodo?

- Un apodo- le respondió- mi nombre es Ginebra Molly Weasley

- Ok Ginny, mi nombre es Naomí Scarlett Morgan

-¿Te gusta Harry?- volvió a cuestionar Naomí y Ginny asintió

Empezó a gritar bajo como loca y luego se calmó y abrazo a su amiga

- Siempre lo supe desde mi segundo año- le comento y Ginny le abrió los ojos

-¿Cómo...?

- La forma en que lo miras, cuando duermes conmigo murmuras su nombre, te sonroja con tan solo verlo y una gran lista sigue

- Ahora que lo pienso- habló la pelirroja-¿por qué te teñiste el cabello?

Naomi se encogió de hombros- tal vez fue la rebeldía del momento