La Tercera Generación

Reunión I

La lectura había acabado, ya no había nada más. Solo algo que los del futuro les debía de decir... si querían evitar lo que estaba pasando en el futuro. Las puertas del comedor fueron abiertas dejando ver a dos personas que rápidamente reconocieron. Eran Quennie y Teddy. Se dirigieron al frente de la mesa de los profesores y se agacharon, mientras que Teddy sacaba algo de la mochila que llevaba.

- Como se les aviso anteriormente. La lectura a finalizado. Lo sé. No sé desanimen, tenemos muchas cosas que decirles a ustedes -. Hablo Quennie, dirigiéndose a los profesores.

-¿Qué están tratando de decirnos?-. Pregunto Snape, observando a la chica.

- Solo ustedes podrán evitar el futuro que tendrán, nosotros hicimos lo que pudimos, ahora es su turno para un futuro mejor -. Dijo Teddy, extendiendo un libro -. Este libro está escrito por los del futuro, incluyéndose ustedes.

-¿Qué se debe de evitar?-. Interrogó Dumbledore.

- La tercera guerra mágica.

Se escuchó una exclamación entre los estudiantes e invitados, eso ya era preocupante no solo por el hecho de que había pasado una, y la que se venía en camino, sino porque no iban a soportar la muerte de más personas inocentes.

- En esa guerra perdimos a, lamentablemente, diez personas. Una de ellas era uno de los que de habían presentado. Creíamos que... que... que iba a revivir como anteriormente había sucedido -. Quennie le dió una mirada discreta a Harry -. Lo peor de eso fue que su propia madre ni hizo nada para evitarlo.

- No queremos decirle por el bienestar de algunos de ustedes pero... pero los adultos nos han dado la misión de decirlo. El libro que acaban de terminar de leer fue por voluntad propia. Le pedimos a Lily que escribiera algo bonito porque no queríamos que se enteraran sobre la verdad... la cruda verdad -. Continuó Teddy, levantándose junto con Quennie -. Lamentablemente Krystal Weasley Granger... falleció para proteger a sus tíos.

Todos los Weasley, incluyendo a Percy, los Potter y cercanos a esta familia se sorprendieron ante la noticia pero se notaba desde lejos que la más afectada era Naomi, y en secreto Hermione.

-¡Maldita! ¡Ven acá!

Rolf y Raymundo tuvieron que detener a Naomi que se iba acercar a la castaña, que tenía la cabeza agachada.

-¿Y Ron?-. Pregunto Bill -.¿Dónde estaba el?

- Es un tema delicado, pero podemos asegurar que está enojado con su esposa. Solo se puede decir eso.

El nombrado nego con la cabeza y se dirigió a sus padres, quienes lo abrazaron mientras que Charlie la daba palmadas en su espalda. Hermione sé levantó de su lugar y salió del comedor, como otras veces. Quennie vio lo tensado que estaban algunos por lo que le susurró algo a Teddy y está asintió, con una mueca.

- Beban ésto.

Hizo aparecer dos jarras y vasos y empezó a servir el líquido en cada vaso.

- Es té. Lo necesitan más que nosotros.

Cuando todos ya habían tomado su té, Teddy se sentó en el suelo mientras que sacaba algo de su saco. Quennie, en cambio, hacía movimientos con su varita.

- Pongan atención a lo que pasará.

Teddy lanzo el objeto, que era un prisma, y este lanzo una luz muy fuerte que pudo haber cegado a los presentes pero su amiga hizo un hechizo para que eso no ocurriera.

- Silencio -. Pidió Teddy.

¡Hola pasado!

- Es Dominique, ¿verdad?-. Dijo Fleur.

- Así es -. Contesto el metaformago.

¡No sé desanimen!
Ustedes son nuestras últimas esperanzas.

- Lo sabemos -. Susurró Harry.

Hagan caso a lo que Quennie les diga.
¡Es por su bien!

-¿Hugo?

La chica asintió.

Teddy y Quennie ya les explicaron lo básico. Así que espero que escuchen lo que ellos le dirán, es de suma importancia que lo hagan.

Su futuro depende de ustedes y de sus acciones.

- Me llegó al corazón -. Dijo Fred, tocándose el pecho.

- Seriedad, Fred, seriedad -. Pidió Charlie a su hermano menor.

¡Adiós! ¡Cuidense!

El prisma se apagó y Teddy lo fue a recoger, mostrando una sonrisa.

-¿Listos para lo que se viene?-. Pregunto.