Harry & Ginny after the war (Español)

Valle de Godric

Una mañana fuera de la madriguera Harry y Ginny recostados en un árbol

-Gin?- Ginny abrió los ojos y lo miró -Quería preguntarte...- Ginny se enteró que lo que iba a decir era serio o le incomodaba. Le agarró la mano y la comenzó a acariciar. -Quería saber si podrías acompañarme al valle de Godric, quiero arreglar ciertas cosas y quiero ver qué podemos recuperar...- Ginny le apretó y la mano -Me encantaría ir contigo. Me alegra que quieras enfrentar tus miedos conmigo- Harry sonrió. -Gracias por arreglar mi vida pequeña pelirroja- Ginny se levantó y le estiró los brazos a Harry para levantarlo. Cuando se levantó no le soltó las manos y se quedaron viendo frente a frente hasta que Ginny habló -Te amo- Dijo con una sonrisa en los labios. Harry le soltó las manos y la agarró de la cintura sin dejar de verla. -No tanto como yo a ti, Weasley- Ginny sonrió y Harry la besó. Se quedaron así cierto tiempo hasta que Harry se separó y puso su brazo alrededor de los hombros de Ginny. Y así se fueron dentro de la madriguera.

-Mamá, Harry quiere que lo acompañe al Valle de Godric y no me gustaría desilusionarlo ¿Puedo ir?- -Claro mi vida, pero tengan cuidado- -gracias mamá-. Ginny entró al cuarto y vió a Harry con la mirada perdida sentado al borde de la cama -Estás bien?- le dijo Ginny acariciándole la mano. Harry entrelazó los dedos con los de ella y apretando la mano asintió.

-Lista?- -Cuando tu digas- Harry y Ginny se aparecieron en el valle de Godric y aun sin soltarse las manos entraron a la casa. Llegaron a una habitación en la que habían muchas cosas tiradas y rotas al lado de una mesita, en el suelo, recogió una retratera pequeña, rota. A Harry le comenzó a temblar la mano y Ginny al darse cuenta avanzó hacia él y le dijo: -Tranquilo, estamos juntos en esto- Harry la miró y sonrió. Siguieron buscando cosas, Harry encontró algunas fotos de Sirius y James de adolescentes.

-Harry, es mejor que volvamos otro día, se está haciendo de noche, mi madre se puede preocupar- -Claro, tienes razón- Ginny no había dicho eso solo porque ya era un poco tarde sino porque se había percatado que Harry se había limpiado las lágrimas más de tres veces.

Llegaron a la madriguera y Ron y Hermione bajaron corriendo las escaleras -Lo siento!- Dijo Ron y Hermione asintió -Si, lo sentimos, no nos fijamos a tiempo...- -Esperen! Tranquilos! Que pasa?- Dijo Harry un poco divertido. -Es que.. Pues... verás...- Empezó Ron -Estábamos jugando con pigwidgeon y... Creo que dió muchas vueltas...- -Ve al grano Ron- Dijo Harry un poco preocupado por lo que podrían haber hecho. -Bueno, como decía... Estábamos jugando con pigwidgeon y... Pues al parecer había comido algo que le cayó mal y... Pues... Vomitó sobre tu ropa...- Harry abrió los ojos como platos. Los cuatro subieron arriba y en cuanto entraron a la habitación percibieron un olor demasiado fuerte y nauseabundo. Harry se acercó a su ropa que estaba cubierta de una sustancia anaranjada algo espesa. Movió una camisa y no soportó el olor así que la soltó. -No importa, luego veré que ponerme chicos, no se preocupen-.

Percibieron un fuerte aroma a perfume, Ginny reconoció el perfume de inmediato que pertenecía su madre pero se extrañó porque ella solo se lo ponía cuando iba a salir o había una reunión importantísima.

La Sra. Weasley bajó de las escaleras agitada y nerviosa pero muy arreglada -Ah! Niños! Han vuelto, me alegro em... bueno, saldré con tu padre- dirigiéndose a Ginny -Hermione me tuvo que recordar que hoy era nuestro aniversario ¡Vaya! ¡Qué despistada! Beno, lo que les quería decir era si podían cuidar la casa mientras no estamos, un gnomo se ha colgado de la cerradura de la puerta y la ha roto, traté de repararla pero... Bueno, no tuve tanto éxito- Los tres voltearon a ver a la cerradura que en ese momento había soltado una especie de tos. -No te preocupes mamá, diviértete- Dijo Ginny acercándose a ella y dándole un beso en la mejilla. la señora Weasley les sonrió con ternura y salió por la puerta que ellos acababan de entrar hace unos instantes.

-Estas cansada?- Dijo Harry luego de dos horas de hablar con Ginny al verla bostezar. -No! para nada- Respondió Ginny incorporándose. Los dos se quedaron viendo por unos segundos y luego los dos dijeron al unísono: -Qué ves?- Ambos se ruborizaron y se dirigieron unas sonrisas tímidas.

Estaban sentados viendo al fuego sin decir nada a causa del sueño cuando Ginny como en un bostezo dijo: -Harry... Te... amo...- Y se quedó dormida en su hombro. Harry no aguantaba tanta ternura y tanto afecto que sentía hacia ella. En verdad la amaba, en serio.

Mucho tiempo después el Sr. y la Sra. Weasley entraron por la puerta y vieron a Harry y a Ginny dormidos; Ginny en el hombro de Harry y Harry recostado en la cabeza de ella con las manos ligeramente entrelazadas. Los señores Weasley hicieron una cara de ternura e hicieron el menor ruido posible. La señora Weasley lanzó un hechizo a la cerradura y ésta hizo un pequeño ruido y se reparó Ginny suspiró pero no despertó.

Ginny despertó por un rayo de luz que entraba por la ventana y por un dolor en la espalda con el incómodo sofá. Se frotó los ojos a causa del sueño y se sentó; Se dió cuenta de que no llevaba la misma ropa, en cambio, llevaba su pijama. Ginny abrió los ojos pensando en que Harry le había cambiado la ropa para que durmiera más cómoda. Ginny se sonrojó y se tapó la cara con las manos. Miró a Harry quien dormía con la boca entreabierta y soltó una risita; luego, le dió un beso en la frente lo que hizo que él frunciera el entrecejo -Ginny...?- murmuró Harry sin abrir los ojos -Shhh... Tranquilo, duerme, lo siento- le acarició el pelo y miró el reloj; eran las 6:15am -Agh!- Soltó. Y dicho esto se volvió a dormir acurrucada en el pecho de Harry.

Nota de autora:

Perdón si este capítulo es más corto que los demás, es que andaba muy corta de imaginación así que no se me ocurrió nada más.

No olviden que pueden comentar propuestas y también si algo no les parece, los estaré leyendo.