𝐁𝐋𝐈𝐍𝐃𝐄𝐑 𝐆𝐈𝐑𝐋 ━ MICHAEL GRAY

02.

LOS PEAKY BLINDERS Y LA FAMILIA DE GRACE SE SENTARON alrededor de la gran mesa del comedor, pasando por alto un gran retrato de Tommy parado con uno de sus caballos. El fuego ardía y la gente mantenía pequeñas conversaciones entre ellos.

Tommy y Grace habían desaparecido, dejando a Arthur destrozado por su discurso. Linda estaba haciendo todo lo posible para consolarlo, pero él era como un ciervo asustado. Olivia también había desaparecido.

Estaba apoyada en el lavabo en uno de los grandes baños, mirándose en el espejo.

No había nadie que ella reconociera entre la multitud, por lo que fue una buena idea deslizarse silenciosamente al baño para recuperar el aliento. Ella evaluó quién sería la mejor persona para acercarse primero.

Polly probablemente le arrancaría la cabeza por irse sin previo aviso, Tommy simplemente la ignoraría. Arthur y John podían ir en cualquier dirección, odiarla o amarla. Ada sería cautelosa al principio, pero podría animarse. Finn había crecido tanto que era poco probable que ella supiera cómo es él.

—Deja de esconderte. Es hora de los discursos—Millie asomó la cabeza por la puerta.

—Todos me odian. Puedo sentirlo.

Liv suspiró y se dio la vuelta para mirar a su amiga.

—No. Eso es un montón de mierda. Nadie te odia. Hubo confusión y malestar cuando te fuiste, principalmente de Arthur. Pero todos hablaron de cuánto te extrañaron cada día. Cualquier sentimiento de ira disminuyó después de un mes.

Millie jaló a Liv en un abrazo tranquilizador.

—No lo sé. ¿Qué pasa si esos sentimientos se agitan cuando me vean de nuevo?

—No sabrás si no lo intentas.

Millie agarró la mano de Olivia y la sacó del ornamentado baño. Isaiah estaba esperando al pie de las escaleras. Las chicas caminaron de la mano para encontrarse con él.

—Correcto, Tommy y Grace están arriba y Arthur y Michael se han ido a otro lado. Eso elimina cuatro opciones. ¿Quién será?

—¿Quién demonios es Michael?—Liv miró a su alrededor confundida.

—Oh, mierda, te espera una sorpresa.

Isaiah se rió y las condujo a ambas a la habitación. En el interior, parecía que toda conversación se detenía y todos la miraban, pero Olivia casi había pasado desapercibida.

Toda la familia de Grace no tenía idea de quién era y la mitad de los que la conocían ni siquiera estaban en la maldita habitación.

—Hay un asiento entre Ada y Esme, ve a buscarlo—Millie empujó a Liv en la dirección correcta, dejándola valerse por sí misma.

Olivia se deslizó silenciosamente en el asiento, ninguna de las mujeres había notado que el asiento estaba lleno, Ada estaba demasiado ocupada defendiendo sus creencias políticas contra alguna mujer rica del lado de Grace.