LA DIOSA DE LA LUNA

Capitulo 30.- Luz de Luna Azul

-¿Cómo que ya no eres pelirroja? -me pregunto algo aturdido, y está en todo su derecho en estarlo.
-Sí amor. -conteste avergonzada.
-Luego me explicarás ¿Sí? No estés avergonzada, yo te amo tal cual eres.
Sonreí ante su comentario y le di un beso al cual yo correspondí y lo abraze.
-Ahora ve -me dijo agarrandome de los hombres, luego me voltio y me dio un empujonsito para caminar hacia el arbusto; y eso hice.
Me dirigí tras el arbusto y cerré los ojos, me concentre en mi otra forma y como todo lobo sentí mis cuatro patas en el suelo, abrí los ojos escape de la ropa que llevaba puesta y con la boca a como pude la metí en la mochila.
"Sal amor, ya te quiero ver" me hablo Caleb por mis pensamientos.
Me dirigí fuera del arbusto con la cabeza agachada escondiendo mis misteriosos ojos morados.
"Tal y como sospeche, sigues siendo hermosa" me ánimo y lo mire a los ojos. Este sólo dio u salta hacia atrás haciendo que me sintiera diferente y posiblemente un monstruo.
"Tus ojos son... mo..." No lo deje terminar la palabra.
"Morados...lo se" dije como sí no tuviera importancia un que sí la tiviera.
"¿Cómo es posible?" Dijo y podía sentir su deshubicacion, siendo así la misma que sentí yo al verme por aquel espejo.
Me miro a los ojos esperando una respuesta congruente, pero ni yo la sabia, lo más creyente sería decirle quien es mi padre.
"Es que mi padre... es..." no pude terminar de hablar por que alguien más me interrumpió, al parecer estaba tan distraída que no había sentido su presencia.
"¡Sam!" Adivinen quien era, Joselin.
Voltee a mis espaldas y pude apreciar a toda la manada sólo que había alguien que no conocía pero supe inmediatamente quien era ya que su cola se movía muy rápido en señal de emoción.
Cuando la vi a los ojos actuó de la misma manera que Caleb.
"Tus ojos... tus ojos son ¡MORADOS! ¡QUE GENIAL!" Creo que lo tomo mejor otras personas.
La manda estaba in pactada, al parecer mi cambio fue muy notorio, pues claro, la primera vez que me vieron era una loba pelirroja y con ojos diferentes, ahora soy una loba blanca y con ojos morados.
Sentí de nuevo una voz en mi cabeza, pero al parecer sono más como un susurro.
"Luego hablamos" definitivamente era Caleb.
Voltie a ver los demás, uno movía la cola despacio o lenta.
"Es bueno verte Sam" comento Thago.
"Hola Thago, opino lo mismo" Respondí
Me empezó a sentir algo mal, ya que todas las miradas estaban en dirección mía pero gracias al cielo Caleb hablo haciendo que lo voltiarmals a ver.
"Bueno manada, estamos aquí para entrenar así que a correr" dijo empezando a correr, pero esta vez sentí como si nunca lo hubiera hecho alguna vez cuando enrealidad si. Mis patas me pedían mas velocidad de la que podía dar, solo que tenía que otorgárselo a mi cuerpo y eso hice.
Empece a correr a una velocidad impresionante, no quería parar pero mi mente estaba espantadas acá que pare y voltee a mis espaldas y me di cuanta que estaban muy lejos de mi.
Creo que tiene que ver mucho que ver con mi padre.
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Terminando el entrenamiento me dirigí a ver a Merlin el cual había olvidado, ya que se supone que debí a verle llevado una foto de mis padres, como no tenía una fui con el papa de Caleb el cual amablemente me la dio, ya que dijo que sería bueno y preferente que tuviera una ya que son mis padres.
Toque la puerta tres veces y en segundos tenía parado enfrente de mi a Merlin.
-Hola Sam. Pensé que se te olvidaría. -fue lo primero que dijo.
-Pues créeme que estuve a punto de hacerlo. -conteste y di una pequeña risa.
Merlin empezó a buscar algo a mis costado y creo saber por que, simple, Caleb no venia conmigo, por que, buena pregunta.
-No , no vino, se quedo en casa, dijo que tenía cosas que hacer con sus padres.
Al parecer Merlin estaba sorprendido a mi contestación y no sabia por que.
-Bueno... Pasa -sacudió la cabeza y quise saber por que así que intente leer su mente pero falle, espero que no se allá dado cuenta.
Extendió sí mano en señal para sentarme y eso hice, me senté y Merlin me miro.
-La foto -comento.
-Ha, sí es cierto. - Busque dentro de mis bolsillo y saque la foto, seguido de eso se la entregue. Pensándolo bien creo que debí sacarle una copia. Puse cara de angustia y al parecer Merlin se dio cuenta, y la verdad es que su manera de hablar da algo de miedo ya que es muy frio.
-Tranquila Sam, te la devolvere.
¿Acaso me leyó la mente?
-Supongo que gracias.
-Ven mañana, te tendré respuestas. ¿Algo mas qué tengas que hablar contigo?
Creo que era obvio. Alce una ceja.
-Bien cuéntame . -creo que se contesto el mismo; su cara cambio a una mas tranquila, como si tuviera un psicologo enfrente de mi.
-Es sobre mi sueño -conteste.
-De eso quería hablar contigo.
¿Qué?
-Dime entonces, que investigaste o encontraste.
La verdad tenía dudas, y muchas, todo esto es raro, mi vida, mi historia.
-Resulta que hace tiempo me contaron una leyenda, sobre ti, la hija del rayo. Pero me puse a investigar y...
-¿Y...?
-Me hicieron una trampa, profetas dijeron que yo encontraria y su meta o como le quieras decir: es matarte.

-¿Matarme? Pero no he hecho nada malo...-conteste, y es la verdad, sus ojos se dirijieron a mi pecho, ¿raro?, pero no era a eso si no a mi collar.

-Tu collar-apunto

-¿Que tiene? -pregunte

-Nunca te lo quites.

-¿Por que? -volvi a preguntar... saben, creo que me he vuelto muy preguntona.

-Te saca del mapa, mientras lo tengas puesto no te pasara nada Sam, estas en peligro, eres una amenaza para ellos, tu padre es muy poderoso y que tenga una hija es arriesgado para ti. Si el muere unos de sus hermanos pasara a su nivel y contigo en el camino, tu seras...

-La heredera, no ellos -termine por el.

-Exacto Sam.

-Creo que ahora tengo mucho que pensar. -le dije a Merlin.

-Si Sam, te entiendo, pero recuerda que aqui estas a salvo con los tuyos, ellos tambien te protegeran si tu los proteges a ellos.

-Eso es espero.-conteste -Gracias...

-No hay de que -contesto

Me pare de mi silla y me dirigi a la puerta y Merlin la abrio y sali dirigiendome al bosque, por que como dije, tengo mucho que pensar, despegarme, llegar a un acuerdo conmigo misma. Necesitaba de mi luna, de mi poder, sentirme grande para poder enfrentar esta situacion, alimentarme psicologicamente absorviendo su luz, la que comparto con mi padre; pensandolo bien aveces siento que la luna me pertenece y tiene mucho sentido: mi padre es el rey de los cielos, usa un rayo y yo... yo soy un lobo y su hija,  la luna es nuestra reina...

Si, la luna es mia, y la protegere, asi como protegere a los que creen en ella.