Hola a todos, sé que ustedes no me conocen a mí pero estoy segura que a mi familia si. Mis padres son excelentes y muy distintos entre sí pero eso no importa pues los quiero a ambos, tengo dos hermanos mayores, una cuñada y una sobrina, por cierto...
El tiempo seguía su curso y todo iba demasiado bien, yo había mejorado mucho en la escuela gracias a Trunks, porque aunque parezca increíble nuestras tardes juntos no eran solamente besos y abrazos, pues él era bastante comprometido con sus responsabilidades y no sólo me ayudaba en física, sino en otras materias.
Además nos las ingeniabamos para salir y tener un momento como pareja, unas veces escapando de Goten, aprovechando sus retardos o incluso una salida al cine entre los tres servia pues ya en la sala mi hermano no nos prestaba mucha atención.
Sin embargo no todo era perfecto por dos situaciones, primera yo ya me estaba cansando de salir a escondidas y cuidarnos de todos y segundo a veces Trunks me hacía sentir que salía con mi hermano o peor ya que era sobre protector conmigo y eso no me gustaba.
Pero bueno para que preocuparme por pequeñeces cuando falta una semana para mi cumpleaños número dieciséis y mi mamá junto con mis amigas y yo estábamos planeando una fiesta pequeña.
Aunque estaba bastante concentrada en los preparativos de la fiesta, mis estudios y el entrenamiento había algo que no dejaba de dar vueltas en mi cabeza. La declaración de UB, ya que a pesar de que no conviviamos mucho mi papá nos hacía practicar juntos y yo no podía evitar sentirme incómoda ante sus miradas, comentarios o movimientos pues me parecía que cualquiera de mis reacciones podía ser mal interpretada y por si fuera poco cada que mi mamá nos veía juntos insistia en que éramos una linda pareja.
Al fin llegó el día ya era sábado y todo estaba listo, desde la decoración, la comida y hasta la música ya sólo estaba terminando de arreglarme para después recibir a los invitados.
Como esta era una ocasión especial y significaba que estaba un paso más cerca de ser mayor de edad, de dejar de ser una niñita y al fin poder dar a conocer mi relación con Trunks, decidí usar algo que lo gritará con solo verme.
Un vestido azul con mucho brillo, con un hombro descubierto y el otro sujeto con un pequeño moño, sin mangas y muy, muy, muy corto. Por lo cual casi le da un ataque a mi madre.
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En cuanto al cabello decidí recogerlo en un chongo alto, con unos cuantos mechones sueltos y mi acostumbrado flequillo. El maquillaje era tenue con labios rosas. Los zapatos plateados y bajos y unos pequeños aretes plateados en forma de corazones.
Todo eso me hacía ver atractiva, pero a la vez mayor y tierna y estoy segura que a Trunks le va a encantar.
Vaya con que aquí estabas llevo rato llamandote pero parece que no me escuchas verdad.
Esa voz me hizo voltear sorprendida.
Wooow amiga te vez perfecta, si que tienes buen gusto y mira que te lo digo yo. Afirmaba Bra haciendo un cumplido.
Gracias que bueno que te guste. Dije un poco sonrojada.
Gustarme Mai, me encanta. Ya imagino la cara que pondrá él cuando te vea.
Él, ¿quién es él?. Pregunté nerviosa.
Cómo, es en serio Mai no me digas que te has dado cuenta... es... Ub esta loco por ti. Dijo emocionada.
AAA UB, si lo sé Bra pero él es sólo un amigo y lo sabe, así que no te emociones ni quieras hacerla de casamentera esta claro. Asegure.
Esta bien amiga yo sólo decía, pero entonces dime para quién tan arreglada. Cuestionó.
Para nadie en especial, pero si recuerdas que yo soy la cumpleañera verdad. Contesté tratando de disimular.
Hola chicas, se puede saber que tanto traman sin mí eee.
Jajaja cálmate Pan, nada en absoluto. Respondí.
Una hora después al fin había empezado la fiesta, ya todos estaban presentes y yo ayudaba a mamá a servir la comida que habíamos preparado en cantidades industriales, pues con tantos sayajin y además el Dios de la destrucción y compañía había que prevenir.
Todo estuvo delicioso y la tarde pasaba muy amena, mientras todos se concentraban en sus platos Trunks y yo nos dedicamos una que otra mirada y algún roce de manos mientras pasábamos la sal o los platos, de alguna forma eso me impacientaba y quería acercarme a él.
Una vez que cayó la noche y todos se dividieron en grupos para poder platicar más a gusto nosotros aprovechamos que estaban distraídos y nos escapamos a la cascada que era nuestro lugar.
