Hola a todos, sé que ustedes no me conocen a mí pero estoy segura que a mi familia si. Mis padres son excelentes y muy distintos entre sí pero eso no importa pues los quiero a ambos, tengo dos hermanos mayores, una cuñada y una sobrina, por cierto...
¡Vamos Trunks, apúrate con esos fideos que tenemos hambre!. Los gritos de impaciencia de Mai resonaban por toda la casa mientras yo cocinaba a toda prisa.
Desde el día en que el señor Goku descubrió toda la verdad ya ha pasado más de un mes así que ahora Mai tiene poco más de ocho meses de embarazo, el momento de conocer a nuestro hijo esta cada vez más cerca y aunque no se lo he hecho saber a ella en realidad estoy muy nervioso.
En este tiempo también mi pequeña ha cambiado, su humor ya es más estable, su vientre está enorme y me encanta, ha aprendido a manejar mejor su ki y el del bebé, todos los días salimos a volar un rato y últimamente le han dado más antojos que antes y muy raros además, como ahora me pidió de desayuno fideos dulces con picante y cerezas, a mi gusto no me apetece en lo más mínimo pero bueno todo sea por ella.
En cuanto aterminamos de desayunar nos alistamos para ir al centro comercial a comprar cosas para el bebé ya que a pesar de que ya sabemos que será niño desde hace tiempo habíamos postergado las compras pero hoy aprovechamos ya que es mi día libre.
Sabés amor ya tengo hecha la lista de todo lo que necesitamos comprar para nuestro pequeño sayajin sólo es lo indispensable. Decía Mai con una gran sonrisa mientras subía al auto.
Esta bien sólo compraremos lo necesario para recibirlo, por cierto ya te dije lo hermosa que te ves hoy con ese vestido. Dije acercandome a ella para besarla.
Pero se separó de mi y respondió. No lo habías dicho pero también te faltó mencionar que parezco un globo. Claramente ese era otro berrinche de los que le daban de vez en cuando.
Jaja claro que no pequeña y aunque así fuera déjame decirte que eres un globo muy hermoso. Respondí algo ocurrente y luego la besé.
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Te imaginas Trunks cuando en lugar de esta enorme panza tenga por fin en mis brazos a nuestro pequeño sayajin.
Si créeme que estoy ansioso por ese momento, me pregunto a quién se parecerá, si tendrá la alegre y luminosa mirada de tu familia o quizás la expresión de frialdad de mi padre.
Sí, aunque creo que tenga la mirada que tenga será un bebé hermoso ya que estoy segura será igual de guapo que su papá jaja.
Bueno amor, espero que en eso tengas razón, sabés ya quiero ver que cara pondrán mis padres cuando conozcan a su nieto y la de Gohan, Goten y Bra al ver a su sobrino. Al escuchar mis palabras la expresión de Mai cambió y se volvió seria.
Ya lo pensaste bien estas seguro de que quieres volver a pesar de los dramas que nos puede armar mi madre. Dijo inquieta.
Claro que estoy seguro amor y lo más probable es que al conocer a su nieto se le hablande el corazón y nos acepté y sino es así yo ya tengo pensado un plan B así que no te preocupes.
Ha si un plan y ¿cuál es?.
No te lo puedo decir Mai solo ten presente que lo sabrás en su momento.
En cuanto entramos al centro comercial mi pequeña hizo volar su lista por los aires y salió corriendo hacia el departamento de bebés.
¡Mai espera, no corras ten cuidado con el bebé!. Bueno ella ignoró mis gritos así que no me quedo más que seguirla.
Treinta minutos después caminaba yo tras ella empujando un carrito repleto de artículos para bebé. Sí son muchos pero eso no importa nada es demasiado para nuestro pequeño sayajin. Decía yo mientras miraba la cara de pucheros que ponía Mai cada vez que yo le decía que no comprara algo.
Una hora más tarde ya estábamos haciendo fila en una caja para pagar todo.
Bueno pequeña al fin terminamos y ahora a dónde va...
El sonoro rugir del estómago de Mai me respondió.
Sabés tengo hambre y si vamos a comer hamburguesas. Respondió ella pasando apenada su mano atrás de la nuca.
Esta bien vamos.
Veinte minutos después ahí estaba mi pequeña y adorable Mai devorando una hamburguesa más grande que su cabeza, debo decir que mi sorpresa se debía a que hasta antes de su embarazo ella odiaba comer hamburguesas.
Dos refrescos de fresa y cuatro hamburguesas después al fin me disponía a pagar la cuenta.
Bueno esta bien vamos a casa, creo que necesito una siesta. Decía ella tallando sus ojos y levantándose.
En cuanto se paró de la silla se quedó inmóvil como si algo la paralizara. ¿qué pasa amor estas bien?. Dije todo asustado.
Haha si tranquilo, no te preocupes es sólo que creo que las hamburguesas me cayeron un poco mal.
Luego del susto regresamos a casa, en cuanto entramos ella se fue a la cama y se quedó profundamente dormida.
Como ya era tarde ni siquiera hice por despertarla, la dejé descansar y ya de noche también fui a dormir.
No sé cuánto tiempo hacía de que me había dormido, pero los gritos de Mai me despertaron.
