AMOR SAYAJIN 💕

CAPÍTULO XXXI

Inmediatamente nos fundimos en un beso muy intenso, al mismo tiempo Trunks me estrechaba contra su cuerpo y acariciaba mi espalda y mi cintura.

Luego de un rato la falta de oxígeno nos obligó a separarnos y lo que vi me impresionó mucho.

La dulce y serena mirada de mi amado tenía algo extraño a pesar de seguir siendo cristalina mostraba euforia pero al mismo tiempo parecía estar esforzándose demás para contenerse.

¿Está bien amor?. Pregunté un poco desconcertada.

Claro pequeña mejor que nunca créeme. Dicho eso me levanto con una sola mano y me llevo hasta la recámara, era una habitación muy amplia toda color crema y con varias lámparas en las paredes, justo frente a la puerta que daba a un balcón estaba una cama King zise con un llamativo juego de cama rojo y plata.

¿te gusta cariño?. Cuestionó bajando justo frente al lecho pero sin dejar de abrazarme.

Claro amor es hermosa.

Que bueno que te guste, sabes esta será la primera en que será ocupada esta hermosa recámara que diseñé únicamente pensando en ti. Afirmó mientras me giraba hacia él.

Muchas gracias que lindo. Dije y volví a besarlo.

Poco a poco pero sin alejarse de mis labios desabotono mi suéter y me dejó sólo con mi delgada bata.

Al fin soltó mis labios y dijo. Estás lista pequeña.

A lo cual yo sólo asentí.

Sus tibias manos se colocaron en mi espalda y bajaron el cierre de mi bata, luego se colocaron en los tirantes y lentamente dejaron caer mi ropa al suelo.

Trunks se alejó y me miró fijamente, luego de arriba a abajo como si me escaneara, pero al sentir su mirada tan insistente por instinto traté de tapar mi pecho con las manos.

Espera no lo hagas por favor, perdón si te incomode pero de verdad te ves preciosa.
Dicho eso se acercó y me llevo a la cama, me colocó con cuidado entre los cojines y se paró frente a mi.

Yo en cambio amor estoy ansioso porque me veas.

Sin prisas se quitó la ropa y al principio todo iba bien desde la  chaqueta hasta el cinturón, pero al ver su pantalón caer algo se disparó y mi interior comenzó a arder, finalmente se quitó el bóxer dejando al descubierto una creciente erección.

Y bien ¿te agrada lo que ves?. Preguntó.

Pero por más que quiera hablar no podía definitivamente me había impresionado más de lo que yo esperaba y solo pude mover la cabeza.

Se acercó y se acomodó sobre mi. Tranquila no te preocupes prometo que te gustará. Afirmó y volvió a besarme y acariciarme.

Finalmente me armé de valor y solte. Espera antes de lo principal quisiera hacer algo.

Sí, lo que desees.

Le pedí que él se pusiera en mi lugar, que se sentará recargado de los cojines y abriera las piernas, ya listo yo me coloqué de frente entre sus piernas y tomé su enorme miembro entre mis manos para acariciarlo lo cual él sólo miraba atentamente, como segundo acto retrocedi un poco, me agaché y puse la punta de si pene en mi boca saboreandola despacio para luego introducirla por completo y comenzar a mover mi cabeza.  Debo confesar que hace mucho quería hacer eso además los gemidos de Trunks que cada vez eran más fuertes aumentaban mi satisfacción.

Suficiente pequeña por favor o esto acabará antes de empezar. Decía el mientras me tomaba por el cabello para detenerme a lo cual yo obedecí.

Rápidamente se acercó, me tomó de la cintura y me acomodó a su antojo sobre sus piernas por lo cual quedamos de frente, él me miró por un momento y luego susurró tengo hambre.

Por un momento yo no entendí sus palabras pero en cuanto sus labios y su lengua tocaron mis pesones encontré el significado.

Ese acto tan simple hacia que una corriente eléctrica me recorriera a toda velocidad, mi espalda se arqueaba de placer y mi boca soltaba sonoros gemidos por su propia voluntad.

Ambos pechos recibieron el mismo trato por un rato, hasta que por fin paró.

Mientras su mano izquierda sostenía mi espalda la derecha bajo y toco con sus dedos mi intimidad que aún cubría la ropa interior.

Estas muy mojada Mai, parece que ya estás lista. Su voz ya no era dulce ahora reflejaba intensa lujuria.

Al escucharlo mire hacia abajo entre mis piernas y pude ver varias gotas que caían desde mi intimidad.

Inmediatamente arrancó mi ropa interior y dos de sus dedos entraron en mi vagina, eso me hizo arquearme y gemir de nuevo.

MMM... AAA... Trunks. Era todo lo que podía decir.

Muy bien Mai ya estás lista. Afirmó y volvió a recostarme en la cama.