Este capítulo como dice el titulo, es alternativo, así que... Es el original, pero decidí que era demasiado desvarío e hice un corta y pega xD un clásico...
Cuando acabé los deberes teóricos, como la redacción que nos mandó hacer la profesora Weasley sobre lo que sabíamos sobre la mágia, avisé a mis amigos que iría a dar una vuelta.
-Te acompaño -dijo James que, al parecer, llevaba los petardos, él me guiñó un ojo cuando le miré a los ojos reprochándole que no quería meterme en problemas nada más entrar a la escuela.
Salimos por el cuadro sin que yo pudiera hacer nada por hacer que se quedará.
-Sé que vas a ir tú sola a la biblioteca a investigar, pero -se volteó y me miró haciendo que el fuera hacia atrás y estuviese en frente de mi- tu no sabes mentir demasiado bien, así que si quieres ir a la zona prohibida, no te viene mal que te heche una mano, no?
-Quién dijo de buscar en la zona prohibida? -pregunté y él se puso de nuevo a mi lado cuando tuvimos que girar por un pasillo, yo vi que sonreía abiertamente y luego me miró.
-A veces hay que buscar hasta en libros que no quieres o incluso crees que no debes, quién sabe si lo que necesitamos está en esos libros?
-Wowo... -me paré haciendo que él también lo hiciese- Quieto un momento, y entonces los petardos para qué son? Para volar alguna sección y distraer a las bibliotecarias? -dije temiendo lo peor.
-Exacto -dijo como si fuese lo más normal del mundo, cuando le miré boquiabierta el encogió los hombros- vamos, que hay que aprovechar el tiempo.
A partir de aquí cambia de capítulo de verdad.
Cuando faltaban un par de pasillos por llegar decidí preguntarle lo que pensaba sobre algo en concreto que me rondaba por la cabeza desde que salimos de clase.
-Oye -dije y justo me arrepentí de ello.
-Dime -él seguía mirando hacia el frente.
-Hmmm... Olvidalo, no he dicho nada.
-No dime, puedes decir lo que quieras, ahora somos como familia -sonrió de lado y me dedicó una mirada corta pero engarusadora.
-Nada, emmm... Bueno, si, podrías practicar cómico después el hechizo expeliarmus? -dije cambiando la pregunta, no tenía el valor suficiente para preguntarle si yo le gustaba, así que decidí hacerlo cuando estuviera preparada, más adelante, aunque pensara que nunca llegaría ese día.
-Hmm... Era eso lo que me querías preguntar? -esta vez me miró muy profundamente a los ojos, que no se me dilanten las pupilas, pensé.
-Claro -dije convencida- si no, qué te tendría que preguntarte?
-No sé, quizás por algún amigo mio -se encogió de hombros de nuevo.