Advertencia de las estrellas

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Volvieron a casa luego de la profecía revelada por Starr. A Nika aún le daba vueltas en la cabeza.

-Buenas noches- le dijo su hermano antes de acostarse sobre el musgo cosido que actuaba como cama para todos los Greenhoods. Nika respondió de igual manera y se recostó. Pensó que esa noche no iba a poder dormir, pero sus párpados se hicieron pesados como por arte de magia. O por arte de las estrellas.

Soñó.

Su sueño era como estar en un infinito lago azul iluminado por un infinito cielo de estrellas. Hasta donde llegaba la vista: Estrellas y su reflejo sobre el agua.

Ese paisaje estaba interrumpido por tan solo una cosa. Más bien dicho una dragona.

Nika se daba cuenta de que ése era una Dragona de Ensueño porque sus escamas tenían colores y no tenía anillo de edad. Alrededor de su cuello llevaba un colgante anaranjado.

-¡Mentiras!- gritó la dragona.

-¿Quién eres?- le preguntó Nika.

-Mi nombre es Ariyi Cei, ahora cállate y escúchame- le respondió bruscamente la dragona.

<Una se cubrirá en sangre enemiga.

Una será tan rápida como el relámpago.

Uno podrá resolver cualquier problema.>

-Que no se te olvide que no hay una sola verdad- fue lo último que Ariyi le dijo antes de que Nika despertara.

Tres Deseos 1: Los ElegidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora