Aradia, hija del dios del inframundo Hades, por lo tanto es hermana de Mal. Entre Mal y ella siempre existió una rivalidad (igual que en el caso de Uma) por saber quién era más mala.
Cuando al fin tumban la barrera, Aradia descubre que tiene poderes...
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Narra Aradia
— ¿Un chico?— pregunto mi padre sin verme.
— si un chico— confirme.
Mi padre camino hacia la ventana y me dio la espalda.
— ¿Como era?.
— el era delgado, como de unos 20-27 años máximo, tenía cabello azul así como nosotros, era alto y pálido, tambien tenia poderes como nosotros y me dijo que era el God of the underworld.
No podía ver el rostro de mi padre pero sabía que estaba tensó.
— también me preguntó "¿Tu padre no te ha contado la verdad?".
Mi padre no contesto ante eso, solo se quedó callado.
— ¿De cuál verdad está hablando padre?— pregunté mirándolo.
— no hay ninguna verdad Aradia— dijo el con un tono de voz serio— son solo sueños y no debes dejarte llevar por ellos.
Giro a verme y en su rostro no había expresión alguna.
— veo que ya estás bien, supongo que ya no debo estar aquí.— dijo y camino hacia la puerta.
— ¿¡Y si son solo sueños porque lo puedo ver en la realidad!?— grite y mi papá se detuvo en la puerta.
El giro lentamente a verme.
— son solo alucinaciones tuyas— dijo sin más y salió.
Solté aire, estaba enfadada e indignada. Mi padre algo esconde y yo lo descubriré.
— ¿Te lo negó todo?— escuché una voz que me hizo sobre saltar.
Mire a la silla que estaba al lado mío y ahí estaba el sentado estaba frotando su pulgar con el dedo índice.
— Tú no eres real— me dije a mi misma cerrando los ojos.
— probablemente tienes razón,en esta vida no soy real— dijo el e hizo su sonrisa macabra.— pero allá abajo si soy muy real— dijo el y se puso de pie.
— ¿Como es eso?— pregunté sentándome en la camilla.
El me miro serio y luego sonrió sin gracia.
— estoy muerto.
Mi piel en ese momento se puso de gallina, trate de decir algo pero las palabras no salían, me quedé atónita del miedo.
—¿¡Muerto!? ¿¡Pero dijiste que eras el God of the underworld!?.
El soltó una carcajada.
— eso es lo curioso, soy un dios muerto. Verás mi querida Aradia— dijo el se acercó a un lado de mi— cuando a tu padre lo llevaron a la isla de los perdidos yo vivía con el en el inframundo, pero esa vez estábamos fuera de ahí, los guardias del ex rey Adam llegaron por el y lo tomaron a la fuerza, aún que el no se dejo, yo tenía siete años e intenté ayudar pero un guardia me apuñaló, no se tocó el corazón para asesinar a un niño inocente— en sus ojos había tristeza al contar aquello— aparecí en el inframundo y dos diablillos se me acercaron, eran Pena y Pánico, ellos me dijeron que como el dios Hades ya no estaba, ahora deberia de mandar yo... Al tomar el trono me transforme en el joven que ves ahora, crecí para poder mandar sobre el inframundo, aunque puedo cambiar si quiero— el chasquio sus dedos y ya no se encontraba el atractivo chico mayor, se encontraba un niño.
