Noveno Capítulo

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Le sudaban las manos, su corazón palpitaba con fuerza y de repente la ansiedad se hizo presente ante un simple encuentro de negocios. Dio un par de pasos hacia delante para ingresar hacia la habitación y cuando su cuerpo estuvo completamente dentro de aquel cuarto, este se cerró rápidamente. Las puertas fueron cerradas por un dispositivo de seguridad y el sonido de una lima recorriendo unas uñas fue lo único que siguió después de eso. El reacciono con un pequeño mohín y se removió incómodamente sintiéndose un estúpido por haber reaccionado de esa manera.

_No se sienta usted intimidado ante los dispositivos de seguridad de esta empresa. Son solo formalidades. _Una voz femenina lleno el lugar y el asintió para sí mismo comprendiendo la situación.

La silla en la que ella se encontraba se giró para que ella se pudiese levantar. Sus largas piernas se dieron paso a levantarse ante él y una mano con uñas recién limadas lo saludo de manera segura. Ella hizo una reverencia y en la siguió hasta que los dos estuvieron cara a cara. Los dos mencionaron sus respectivos nombres y se presentaron formalmente.

Al terminar los formalismos un silencio reino la habitación. La mujer de cabello azabache examino la cara del Jisung dándose cuenta de que no tenía aspecto de ser un sicario. Se preguntó cuántos años podía tener aquel chico y el por qué se le hacía conocido ante sus ojos. El espero a que ella terminara de analizarlo con la mirada mientras su propia expresión se tornaba fría y profesional.

_ ¡Oh perdón!, tome asiento por favor. _ Y él siguió sus indicaciones.

_ ¿Si sabe a qué me dedico? _ Efectivamente ella lo sabía muy bien, pero más allá de su profesión y su nombre no estaba familiarizada con algún otro dato del joven frente a ella.

_Si lo sé, pero no lo llame para que elimine a alguien, lo llame para que sea mi guardaespaldas. _Jisung se preguntó entonces si su memoria le fallaba, había escuchado claramente a el asistente de esta mujer que necesitaban eliminar a alguien y nada más.

_Yo no soy el niñero de nadie. _ Sentencio el chico esperando aclarar las cosas.

_La paga es generosa, vivirás en donde yo viva, comerás lo que yo coma, yo haré lo que tú digas. _La última frase termino por darle escalofríos. ¿No se suponía que ella sería su jefa?

_Perdón. Los ricos no hacen lo que los pobres dicen. _Jisung bufo con una evidente cara de incredulidad.

_Se llama confianza. Yo confío en ti y tú confías en mí. ¿Te parece mi trato? _Él no podía mirarla a los ojos un segundo más, parecían los de una cobra. Ensartados en maldad punzantes como una aguja. Las miradas que le parecieron malvadas en la correccional de menores habían sido reemplazadas por la mirada de la mujer con cabello azabache.

No tenía nada que perder y mucho que ganar, no era su estilo el cuidar parcialmente sino eliminar totalmente. Nunca le importo nada desde que empezó a ser un proxeneta, pero ahora se encontraba pensando en sus opciones como si su vida valiese más que un par de miles de dólares.

Por primera vez en años respondió después de pensar fríamente y expectante a las consecuencias _Sí, pero no firmare nada yo no trabajo con papeles. _ Taeyeon se cruzó de brazos esperando crear algún tipo de arrepentimiento en Jisung y que este decidiese ceder.

_¿Por primera vez te dedicaras a un trabajo legal y te rehúsas a firmar papeles? _Taeyeon se cruzó de brazos esperando crear algún tipo de arrepentimiento en Jisung y que este decidiese ceder.

_No me interesan sus formalismos, yo soy un hombre de palabra. _Jisung procedió a hacer crujir sus nudillos para liberar la presión del momento.

_Me quedare con eso entonces. _Termino la conversación su ya empleadora.

_Puedes retirarte hare que le manden el contrato a su correo solo para que lo lea y discutamos. Le daré una cita. _Ella se voltio y se dirigió a su asiento.

_No gracias vendré sin previo aviso. _Espeto el azabache y salió una vez que la puerta se habría completamente.

Placer Vacío || ChensungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora