Sexto Capítulo

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Se levantó otro día más sintiendo el alcohol y el cigarrillo impregnados en su garganta. Se removió al sentir las manos frías de Chenle alojarse sobre los huesos de su pelvis en busca de más descubrimientos de certeza de una reacción. Se dejó llevar por aquel toque, sus movimientos y la manera delicada en como rozaba sus muslos. Esto había empezado como una curiosidad, un juego, pero se estaba tornando un tanto pecaminoso.

Un gemido termina saliendo de su boca con temor y resignación para su va y ven y mira A Jisung directamente a los ojos.

_ ¿Por qué no me detienes? _Susurra de manera agitada y desesperada esperando alguna reacción de parte de Jisung.

_Pensé que era lo que querías. _ Digo Jisung algo confundido.

Él se acerca a Jisung e intenta besar su cuello mientras Jisung toma sus caderas para alejarlo.

_Ves, no sabes lo que realmente quieres. _Jisung se levanta de la cama y se sienta de manera desesperada ya harto de la inmadurez de Chenle.

_Estoy perdido en ti desde la primera vez que nos conocimos, la manera en la que tus ojos me miran me incita a hacer este tipo de cosas. _Chenle después de confesarse tomo la cara de Jisung entre sus manos y respiro su aroma como si de una flor se tratase.

_Nunca pensé que las cosas llegarían hasta el punto de frústrate. _Jisung lo miro a los ojos en busca de alguna reacción de su parte.

_No estoy frustrado, estoy..._ Chenle grito desesperado.

_¿Estas? _Espeto Jisung ya harto de todo, estaba volviéndole loco ese niño rico y mimado.

_Olvídalo y concéntrate en pasar esas manos por cada centímetro de mi cuerpo . _Menciono Chenle a la vez que Jisung poso sus manos en las delicadas clavículas del rubio para seguidamente pasar sus dedos de manera lenta sobre estas mientras Chenle cerraba los ojos.

Jisung hizo exactamente lo que le pidió hasta que en medio de un beso Chenle se quedó dormido.

_No podrías ser más adorable. _ Susurro Jisung frente a él, pero Chenle no lo escucho solo se apegó más a él atreves de calmadas respiraciones.




Al ser expulsada del orfanato las madres le dieron dinero suficiente para vivir unos meses mientras conseguía trabajo. Para el cabo de unos meses tenía dos trabajos de medio tiempo para pagar la renta y poder comer.

Se sentó en una de las sillas del parque y sintió como su energía se desplomaba. La renta de este mes le estaba pisando los talones y los dos trabajos de medio tiempo no le estaban alcanzando lo suficiente. Una señora se sentó a su lado y empezó a rebuscar en su amplia cartera como si esta fuese un agujero negro.

_Cariño ¿Tendrás de casualidad un espejo que me prestes? _Pregunto la señora sin ni una gota de formalidad.

_Si, por supuesto, aquí tiene. _Taeyeon rebusco en su bolso de cintura y le tendió un pequeño espejo barato a la señora.

_Gracias querida. _Ella lo tomo rápidamente y reviso su maquillaje brevemente para luego voltearse a verla.

_Tu eres muy hermosa y gracias por el espejo. _Dijo la señora tendiendo el pequeño espejo.

_Gracias. _Taeyeon hizo una pequeña reverencia y se acomodó en su asiento.

_¿No te interesaría trabajar de bailarina en mi club? y no, no te tienes que desnudar ni acostarte con nadie si eso pasara me cerrarían el negocio y todos mis trabajadores y yo nos terminaríamos muriendo de hambre. _ La señora puso cara de fastidio mientras le aclaraba que el club era legal.

Placer Vacío || ChensungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora