lα curα: tєmpσrαdα ɪ [ⁱᵗᵃᶜʰⁱ]

ՏᗴᑎTIᗰIᗴᑎTOՏ

ⁿᵃʳʳᵃᵈᵒʳ ᵒᵐⁿⁱˢᶜⁱᵉⁿᵗᵉ

Los sentimientos negativos se habían disipado en el preciso momento en que noto al intruso.

—Estan aquí por ella —piensa, esquiva las estrellas ninjas. 

—Vaya, vaya. Haz progresado —se detuvo.

—Eh! —ambas armas chocan. —¿Te conozco? —mira amenazante al sujeto con máscara.

—Jhmp, claro que no —le cogió de los antebrazos, evitando que el arma filosa de su oponente llegara herirlo. —Nadie me conoce.

—¡E-el Sharingan! —exclama.

—Oh, ¿lo viste? —sonrió bajo la máscara. —Error mío —da vuelta en su propio eje, arrastrando consigo a Shisui.

Y lo suelta, mandándolo por los aires.

—¡Maldición se escapa!.

—Ha, hace tiempo que no asistía una boda. Baka.

☾ 治療法 : 𝓛𝓪 𝓒𝓾𝓻𝓪 ☀

El sol comenzaba a ocultarse.

La celebración apenas empezaba, los invitados en sus respectivas mesas comíendo mientras escuchan los discursos de felicitación de diferentes conocidos para los recién casados.

Entre avergonzados y alegres por los consejos de sus mayores, la pareja pudo regalarse hasta cierto punto.

—¿Lo ves?, todo salió bien.

—Hmm, podría ser mejor si hubiéramos tenido más tiempo —se quejo su esposo.

—Cariño.

—Hahahaha, Fugaku-san no arruines la atmósfera —intervino el rubio.

—Oto-san.

—No pasa nada Itachi —argumento para cerrar la conversación.

Se puso de pie, en silencio se fue de la mesa seguido después por Mikoto.

—¿Minato-oto-san, que fue lo que ocurrió? —pregunto la pelirroja confundida.

El rubio suspiró profundamente inquieto, cogió la copa de vino que había enfrente dándose tiempo para inventarse una escusa convincente.

—Si me permiten unos minutos de su atención —pidio el líder del clan Uchiha. —Cof, bien. Es un día que nunca debemos olvidar, mi hijo; Itachi. Hoy dio el siguiente paso, tomar las riendas a su madurez, sentar cabeza; Itachi no me decepciones —lo miró fijamente. —Para la ahora hija mía, Yin. Cuando te vi por primera vez, me dije a mismo: ella es la correcta.

—Fugaku-san —murmuro conmovida.

—En el poco tiempo que voy conociéndote la buena impresión que tuve de ti, va en aumento, por eso te pido ésto, cuida de mi hijo. Eso es todo —finalizo.

La gente trato de no reír con la actitud avergonzada del líder Uchiha, que le entrego el micrófono al pequeño rubio y se retiró lo más rápido que pudo.

—¡TRES,DOS, UNO!. ¡ME OYEN! —grito el menor.

Sasuke que está a su lado le quitó el micrófono.

—Tsk, mira y aprende —le dijo muy seguro de si mismo.

—Si, como digas dattebayo —hizo un puchero de disgusto.

—Yo- —se detuvo, los miles de miradas puestas en sobre él, lo pusieron nervioso.

Incluso su madre le sonreír ampliamente con los pulgares arriba alentando lo. Pero cuando hayo la mirada de su hermano, todo cambio.