Los Siete Diamantes del Destino [Libro 2]

Capítulo 9: "Tiempo"

—Nos falta poco para llegar, solo quedan 3 calles—Stephanie dirigía la pequeña caminata de 20 km de recorrido, acompañada de Regina y Claris.

—No saben cuánto deseo un vaso de agua—Con su gran espontaneidad y carisma, Claris intenta levantar el ánimo de todas las chicas, más sin embargo, ella también se siente exhausta y paranoica.

—Oigan, quisiera preguntarles algo que también últimamente me eh estado cuestionando—Regina con su mirada desalentadora desde el principio del recorrido, proseguía con su charla al paso de no alejarse demasiado.

—¿Por qué no lo dijiste antes?, Dinos—Agregan las dos al unisono.

—¿Por qué a pesar de sufrir una severa pelea, y presentar habilidades sobrehumanas, me sigo sintiendo con mucha energía?, aunque es diferente a mi sentir tan profundo de soledad y venganza por parte de lo que le hizo la Reina Oscura a mi familia.

—Eso mismo me pregunté, por eso mismo me extrañó la idea de seguir en el mismo lugar si estábamos en un hospital con salud de gravedad—Interviene Stephanie muy interesada en el tema, pues fue ella quién recuerda como recorrían los pasillos de aquel hospital.

—No sé cómo responder ante estas cuestiones, pero en mi corazón se siente un desespero muy fuerte, que se asusta cada vez que recuerda la posesión de un poder incapaz de poder entender con facilidad. Me asusta pensar que esto es algo malo o bueno, y que nos podría traer problemas en un futuro. Aparte de que ni siquiera sabemos usarlo bien—Los sentimientos de las tres empezaban a sobresalir y las dudas y miedos no se quedaban atrás, Claris fue la primera en tener el valor para demostrar cómo el miedo la consume a la vez crecer como humana.

—Me niego a aceptar que, gracias al dolor mis manos y mi cuerpo adquirieron un poder monstruoso. Aunque siendo sincera, también temo como pueda influir nuestros dones o lo que sea que tengamos Claris y yo.

Stephanie escuchaba las charlas de sus amigas, no obstante había algo que la detenía en un mar de pensamientos llenos de confusión y locura, donde la pregunta que reluce en los cielos de su extensa mentalidad, era ¿Por qué la Reina Oscura no me asesinó cuando tuvo la oportunidad?, Y aún más difícil de digerir, ¿Por qué me dejó caer cuando profundizó en las pupilas de mis ojos?, No entiendo nada, espero y podamos mis amigas y yo descifrar estás incógnitas que nos perturban los nervios más interés de nuestro cuerpo.

Por fin, las tres estaban en frente de la puerta donde reside Stephanie, al verla denotaba ese extraño sentimiento de No Retorno.

"El Tiempo no se encapricha con la vida, sino la vida se adhiere al tiempo".

Contemplaban como sus vidas al cruzar esa puerta cambiarían, al momento de sumergirse en una historia que al mismo tiempo es regida por seres sumamente poderosos. Hasta que la Valentía y la Osadía se apoderaron de sus cuerpos, terminando por cruzarla.

Lunes 9 de Diciembre del 2019

—¡Hasta que te encuentro querida...Crei que jamás te conocería!—En un centro de cómputo en el centro de la Ciudad de Tokio, Japón. La Reina Oscura hace su entrada destruyendo todas las entradas y matando con sus lianas malditas (su nuevo poder) a los empleados de aquel edificio.

—¡Milagro, por fin te conozco en persona!, Te estuve vigilando todo este tiempo...¡INTENTE DISTRAERTE UN POCO MI AMOR!, Pero eres demasiado inteligente...Me sorprendes, espero y tengas varios doctorados...UPS, perdón vienes de un mundo totalmente retrasado en Tecnología!!!—Responde la Reina más vengativa y ávara de todas; Annette la Reina de la electricidad.

—¡No tendré doctorados, pero lo que si se, es que soy Maestra divina de la Destrucción y la muerte, y ya me imaginé 9 mil maneras de como asesinarte!—Debajo de sus vestidos, las raíces de aquellos árboles que manipulaba Sayuri, se extendían obedeciendo la maldad, amenazando con dar inicio a una batalla más entre la Reina Oscura y una reina elemental.

—¡Espero y no me odies por ser tan cálida y dulce contigo, al electrocutarte de pies a cabeza y que termines como una deliciosa parrillada!, Y no te preocupes, a todo esos lugares donde te mandé, fueron mis lugares favoritos para torturarte en tu futuro infierno.