XIV

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Maratón 2/4


Ash

Desperté gracias al sonido de mi teléfono, miré la hora y vi que aún no era la hora en la que tendría que llevar a Jihyun al colegio así que fui hasta donde estaba mi teléfono y descolgué la llamada antes de que se cortara. Era un número desconocido pero igualmente respondí.

Cuando aquél sujeto comenzó a hablar sentí como toda la sangre de mi cuerpo de congelaba y mi alma salía de mi cuerpo. Aquella persona que me llamaba era el abogado de mi tía y me informaba que mi tía no pensaba llevarme a juicio pero que si me resistía a no darle a Jihyun no le quedaría otra que hacerlo.

Cuando la llamada finalizó dejé el teléfono sobre la mesita donde estaba y me senté en la cama con las manos ocultando mi cara, no pensaba llorar pero era frustrante que no dejara de haber problemas por todos lados.

Me levanté dispuesto a darme una ducha relajante para después poder preparar las cosas con calma, aún era temprano por lo que dejé a Jihyun seguir durmiendo un poco más. Preparé el desayuno para todos y organicé la mochila de Jihyun y la mía; cuando vi la hora en el reloj de la cocina fui a llamar a Jihyun para después ayudarle a vestirse y llevarlo a desayunar.

El resto del día no fue distinto a los demás, lleve a Jihyun al colegio, fui a la universidad y después volví a recoger a Jihyun para volver a casa y que pudiese hacer sus tareas. Por otro lado, mi relación con Taehyung y Hobi cada vez iba a mejor, siempre podía confiar en Hobi como si de un hermano se tratase mientras que Tae comenzó a reunirse con nosotros en los recreos.

Toda la semana pasó de la misma manera, siguiendo la misma rutina, le conté sobre la llamada del abogado a mis dos amigos y presenté mi aceptación y requisitos al abogado que me asignaron, ahora solo faltaba que mi tía de vía libre a mis requisitos y el juez la dará la custodia de mi hermanito.

Sería muy difícil acostumbrarme a su ausencia pero de momento estaba con él y debía aprovechar al máximo antes de separarme de él por toda una semana. Para aprovechar ese tiempo, decidimos todos llevarle a su parque de atracciones favorito.

Cuando al fin llegamos Jihyun salió corriendo a mirar todo pero como había demasiada gente y no quería perderlo de vista salí corriendo detrás suya. Conseguí alcanzar a Jihyun y cogerlo de la mano pero cuando miré hacia el lugar por donde habíamos venido no conseguí encontrar a Tae ni a Hobi por lo que comenzamos a buscarlos sin éxito.

Para no arruinar el día de Jihyun decidí decirle que ellos habían ido a investigar a algún lado para ver en qué restaurante podríamos comer más tarde. Mientras caminaba junto a Jihyun choqué con alguien provocando que el agua que estaba bebiendo acabase en la ropa y en el suelo de la persona, inmediatamente me giré y le pedí disculpas.

- Está bien, no te preocupes, solo fue una botella de agua.- Me dijo un pelinegro de más o menos mi altura.

La verdad es que ese chico era bastante atractivo, sus ojos eran negros y pequeños, su piel era pálida y tenía un ligero sonrojo natural en sus mejillas, por no hablar de su voz grave...

Me abofeteé mentalmente para volver a la realidad y dejar de mirar a ese chico como si fuese el mismísimo Jesucristo.

- Debería compensarte por ello, ¿por qué no vienes a comer con nosotros? No puedo aceptar un no por respuesta, al fin y al cabo te lo debo por haberte tirado el agua encima.- dije sonriéndole, el chico pareció pensarlo por un momento para después volver a mirarme.

- ¿Como podría aceptar si ni siquiera se como te llamas?- dijo un tanto divertido por la situación. Me sonrojé por haber sido tan estúpido como para no haberme presentado.

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