cap 8

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incluso si las horas pasasen volando la familia las seguía sintiendo como un martirio. Hacia ya dos hora que no sabían del paradero en absoluto del moreno, keith caminaba de un lado a otro, su pelo era revuelto por sus manos, su padre se encontraba haciendo algunas llamadas y su madre intentando desesperada mente calmar a su pequeño.

adam en un intento desesperado e improvisado sentó a su hijo frente a televisor, envolvió con una manta cercana y prendió el televisor, justo en ese momento todos quedaron boquiabiertos.

el televisor encendió en el noticiero, el reportero se encontraba frente a un orfanato, de fondo miles de policias y algunos militares con un uniforme similar a los que su padre entrenaba, entre ellos se diferenia un moreno alto el cual se encontraba liderando aquellos pocos soldados. De pronto entraron a aquel horfanato, el reportero simplemente narraba las cosas que se podían ver desde afuera, no le era permitido pasar; el corazón de keith comenzó a latir fuerte, no entendía que le pasaba, sus piernas se movían por si solas y salió corriendo de su casa hacia la dirección que alguna vez dijo el reportero beta de la televisión, corría a la velocidad que su cuerpo le permitía, su corazón seguía latiendo con fuerza, era extraño.

Al llegas empezó a observar de un lado a otro, el ares estaba acordonada por cintas de policías, ya era de noche y las luces de aquel lugar alumbraban poco, entre la multitud logró escabullirse hasta el principio y entrar Gracias a la influencia de su padre; con desesperación buscaba con la mirada al moreno y lo encontró, rápidamente corrió hacia este y sorprendiéndolo se abrazaron.

-lance, qué pasó?, que hacen aquí?- preguntaba el omega desesperado y agitado

-después de lo qué pasó con aquel Niño no pude sacármelo de la cabeza, se que tú tampoco, primero intenté buscarlo pero al parecer no hay registros de el, después investigue y note que este orfanato tenía muy malas reseñas así que llegue y reconocí a las monjas de la vez pasada, después simplemente armé un pequeño alboroto- rio ante lo último de su explicación

Después de eso el corazón de keith volvió a exaltarse, buscando con desesperación entre los niños, intentando encontrar aquella cara que le hacía falta; volvió la mirada hacia su alfa y este agachó la mirada con una expresión de tristeza y angustia.

-pero a pesar de todo esto...no logre encontrarlo- suspiró

Keith quedó en shock, sus ojos comenzaron a lagrimear sin su permiso, su vida se desmoronaba; el alfa rápidamente lo abrazó y este se acurrucó en el pecho del moreno con un gran llanto, de repente los corazones de la pareja se exaltaron, era extraño, keith rápidamente se alejó de lance y corrió adentro del lugar, a pesar de estar prohibido El Paso keith corría por los pasillos siendo resguardado por lance quien lo seguía de cerca.

Keith corría de un lado a otro, abría cualquier habitación la cual fuese posible, buscaba dentro de todo lugar en donde su corazón lo dejase en paz y aún no había rastro, sus ojos comenzaban a nublarse por sus lágrimas y sus piernas querían empezar a flaquear.

-DANIEL!!- grito en desesperación el omega

Todo quedó en un completo silencio, quería caer y darse por vencido, lo había abandonado por segunda vez, acaso había algo malo con el?, porque el destino se ensañaba en darle una pizca de felicidad y luego lastimarlo más de lo debido?.

-DANIEL!!...cariño, responde....soy yo..mamá, todo estará bien...por favor..responde- decía difícilmente entre lágrimas

A pasos lentos y frágiles se dirigía hacia la entrada, su corazón se encontraba aplastado cual manzana podrida, sus ojos rojos y sus mejillas echas mares; de repente un olor capta la atención de keith, en un último intento desesperado lo siguió, corrió y tras de él varios policías y su alfa; lo siguió con desesperacion hasta llegar a un librero, rápidamente fue derrumbado por el alfa y sin perder un tiempo keith entró a la puerta escondida tras de este.

Todo se encontraba obscuro, olía mal, se escuchaban pequeños susurros, lance encendió una lámpara y empezaron a notar como se encontraban ahí al menos como cinco niños, todos en una esquina, temblando de frío y hambre cual ratas; el pequeño se levantó rápidamente como pudo y corrió a los brazos de keith y este le recibió con un llanto y besos, muchos besos; lance y los demás policías ayudaban a sacar al resto de niños de aquel espantoso lugar y llevarlos a la pequeña ambulancia fuera del recinto, al fin acabarían con esta pesadilla.

Quiero un bebé!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora