Te amo

[Pendejo]

Es mi primera historia, no estén chingando

{Psd; los amo A La Verga}

[🌮]

—Solo uno—. Japón miro suplicante al pequeño latino acostado con el en la cama, México estaba avergonzado y su rostro rojo lo demostraba.

—Esta bien—. Japón sonrió, para hacercarse al mexicano con lentitud y darle un tierno beso en los labios, un beso corto y amoroso, que solo dejo al menor con un gran sonrojo en el rostro.

Y es que para México, descubrir la faceta amorosa y empalagosa de Japón fue el cielo. El asiático era bastante amoroso y educado con el, tratándolo como si fuera la flor más delicada del mundo, como si fuera frágil y necesitará ser cuidadoso la mayor parte del tiempo. Y es que se sentía tan amado con cada caricia o detalle de su ojitos de raya.

México ya estaba perdidamente enamorado de su hermoso ojitos de raya.

—«Amor»—. Llamó Japón, mientras jugaba un poco con el estómago de este, haciendo círculos en sus longitas .—«Eres lo más importante en mi vida»—. Espreso avergonzado.

Y México casi se muere de un infarto al escuchar a Japón hablar en su idioma. ¡Japón estaba hablando español solo por el! Méxio se incorporo asombrado de la cama y miro al asiático con ojos brillantes.

—¿Acabas de hablar en español?—. Cuestionó, mirando al japonés que solo miraro a otro lado, aún apoyando su cabeza en las contorneadas piernas de su amado

—No...—. Susurro, sintiendo como las manos de su pequeño enamorado sujetaban sus mejillas y lo obligaban a verlo. Japón miro a la perfección la ilucion y el amor en los ojos del latino, ahora no se arrepentía de haber estado en "traductor Google" practicando esa frase toda la noche.

—Dilo otra vez—. Suplico, para después mirar al japonés mirarlo con suplica, no quería repetirlo. Pensaba que se había escuchado mal.

—No... —. Suspiro, haciéndose del rogar. El latino solo atinó a aprisionar más sus mejillas y comenzar a dejar besos por su rostro, susurrando a cada momento la frase “Dilo otra vez, vamos solo una” tal y como el se lo había pedido momentos antes con el pequeño beso antes dado . —«Eres lo más importante en mi vida»—.

México solo un chillido con emoción, mientras aún con el rostro del asiático bicolor en manos se dispuso a darle un largo y duradero beso en sus finos labios.

—¿Qué hice para merecerte? —. México miro ensoñado el rostro apachurado (gracias a sus manos) del asiático, que solo le dedicó su mirada llena de cariño.

—Ser tu... Eso hiciste—. Y Japón solo atinó a quitar las manos del mexicano de su rostro, y lanzarse a besar los carnosos labios de su amado.

•••

—¡Wey! ¡wey eso es trampa! —. Chillo con fuerza, para después volver a su tarea de apretar con fuerza los botones del mando que tenía en sus manos, solo escucho la melodiosa risa del japonés y miro como este hacía un combo con su personaje.

—No es trampa si se como se juega—. Aun mirando la pantalla, y ya casi haberle ganado a su menor, sin embargo no quería ser tan malo con el, así que le dio chance. Aunque no la suficiente como para ganar.