Ellos son completamente diferentes y jamás compartieron una relación normal, aún asi hasta los últimos momentos juntos entregaron todo por nada.
Portada hecha por: Liberty editoral.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sentí que todo paso en cámara lenta, la abuela se acerco a nosotros y con una sonrisa fingida me miro.
—Que sorpresa, no esperaba encontrarte aquí.
—¿Qué es lo que quieres? —pregunto con enojo—Acaso no te basto con arruinarme la vida?
—No te arruine nada querido, si lo hubiera hecho no estarías aquí con Fernanda—argumento—Lo único que quiero es ese aparato que hizo Fernanda, vale millones en los Centros Científicos.
A la mención del invento Fernanda se tensa, la miro intentándolo decir que todo esta bien aunque sepa en el fondo que no lo estará.
Los hombres que acompañan a la abuela sacan armas y nos apuntan.
—No quiero hacer esto difícil, dénmelo y los dejare en paz.
—No te daremos nada—anuncio—Será mejor que te vallas.
—No me iré hasta que me lo den.
Fernanda se acerco a mi y susurro:
—Todo va a estar bien.
Se acercó a la abuela y fingió que se lo daría dándole un puñetazo en la cara, uno de los hombres intento disparar pero yo fui mas rápido y le quite el arma golpeándolo con ella.
En ese momento todo se volvió caos, recibí fuertes golpes en la nariz y Fernanda en el estómago. Alejandra entro por la puerta con dos armas apuntando a Fernanda, me acerqué a ella y la empuje sintiendo en ese instante una bala en el brazo.
El dolor era soportable pero Fernanda miraba con culpa mi brazo.
—Tenemos que terminar esto, este botón es el último para sacar a mamá de la maquina—dijo señalándolo—Ten—puso un arma en mis manos—Si las cosas se ponen feas, dispara.
Fernanda deposito un casto beso en mis labios.
—Te amo—murmure.
Fernanda sonrió y me dio un beso mas largo.
—Lo sé, siempre ocultas tus sentimientos.
—Te amo tanto que no te dejare hacer esto—solté la pistola y quite el invento de sus manos, presione el botón, todo se volvió oscuridad.
No sentí nada, mas que la oscuridad llegando a mi. Sabía lo que pasaba, los que entraban heridos no sobrevivían. Morí feliz, le dije lo que sentía a la única persona que me ha importado.