Era de madrugada, calurosa por el acercamiento de la temporada de lluvia que por cierto, Ya estaba empezando.
La rubia salió poco después de intercambiar algunas palabras conmigo poniéndome al día sobre la vida de mi padre y dejándome las instrucciones de una misión que se aproximaba.
Sintiéndome un poco hambriento, y viendo que mis recursos para este maratón se habían acabado, me levanté para sacar más comida de la despensa y volver al hueco que había formado en el sofá.
Tomé la bolsa de palomitas y proseguí a colocarlas en el microondas, mientras el tiempo marchaba me puse a buscar un tazón y dejar caer todas las frituras que había escogido, luego a cortar otro trozo de pastel de chocolate y finalmente tomar la última caja de donas que había acompañada de dos latas de refresco.
Pepsi.
Pocos segundos después el sonido del microondas se hizo presente y me sentí satisfecho, de haber logrado todo antes del tiempo aproximado.
De nuevo en mi hueco, arropado y con todos mis recursos en la mesa no tardé en presionar Play en la película.
Por supuesto que todo estaba muy tranquilo, se supone.
Pero el sonido de un silbido me dió un susto del carajo.
Y como gran adulto que soy.
Agarré un cojín tome el tenedor con el que estaba comiendo el pastel y me acerqué a la ventana.
Podía ser el viento. Pero era un silbido provocado, estoy seguro.
¡Si alguien sale o trata de romper esa ventana le apuñalo con este tenedor!
Cuidadosamente daba pasos hacia el ruido proveniente. Y cuando finalmente estuve en frente del vidrio...
No había nada.
Solo veía mi reflejo, mi cabello despeinado y mis ojeras notorias. Mi nariz y mejillas estaban rojas.
Quizás por el calor que hacía.
Rayos, viéndome así...Me pregunto si hoy habré tomado un baño.
¿Al menos me cepillé al levantarme?
Con todas esas dudas ocupando mi mente bajé la guardia y regresé a acomodarme en el hueco del sofá.
Continué la reproducción mientras comía del trozo de pastel.
Pero el ruido de las aves saliendo disparadas de un árbol me dieron un ligero susto.
No me asusté tanto señores..Fue algo pequeño..
Y en menos de tres segundos ya me veía en la misma posición con el tenedor y el cojín. Estaba decidido.
Iba a salir a ver qué había allá fuera.
Si era la loca de la china esa.
O si eran niños tratando de hacer una broma.
Abrí las puertas de un solo golpe y el poco viento que había en afuera me recibió. Las calles estaban iluminadas por las luces.
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Blue Eyes [C A N C E L L E D]
FantasíaVoy a dejarlo en tus manos por una semana. Escúchame bien...Si algo le pasa te juro que voy a- Shhh ¡Cálmate! Estará muy bien, después de todo ¿Qué tan difícil es cuidar de un puberto? •Historia Dedicada a toda la saga de DMC. •Mención del pequeño N...