Dejame amarte, bebé. «Yoonmin»

031

Eran aproximadamente las dos de la mañana, cuando Jimin se decidió por levantarse de la cama, quitando con cuidado los brazos de su novio quien lo mantenia preso.

Se apresuró a buscar su teléfono y guardar algunas cosas como llaves y dinero en sus bolsillos, tomó un cubre bocas que era de Taehyung y se propuso salir.

La madrugada estaba fria y sin duda empezó a temblar al sentir el frio viento congelar sus manos, sus lagrimas empezaron a surgir mientras que su pecho se oprimía con angustia.

Caminó sin rumbo durante largos minutos, ni siquiera las calles desiertas le provocaban miedo, su único pensamiento en esos momentos era desaparecer, todos los comentarios de sus padres y fans lo había destruido.

Él habia vuelto a Yoongi "diferente", era su culpa.

Como si todo estuviera planeado su pasos lo enviaron a un puente.

Su cuerpo tiritaba del miedo, por un momento en su cabeza pasó la idea de terminar con todo, así que con pasos vacilantes se dirigió mas cerca, sintiendo como a su paso él miedo y la rabia lo iba dominando.

De pronto recuerdos crueles empezaron a inundar su cabeza incitandolo en su decisión.

Se aferró a la baranda fria de metal y observó hacia abajo, en su interior estaba la esperanza de que algo ocurriera.

Lloró por un minuto desconsoladamente y justo cuando se impulsó para subir al puente su teléfono empezó a sonar en su bolsillo.

Algo lo hizo caer al suelo, lleno de nostalgia. La vida no queria que esto terminara solo así.

Tomó él teléfono con sus manos temblorosas y lagrimas embarrando su cara para contestar rápidamente la segunda llamada que Yoongi le realizaba.

—Park Jimin, ¿Donde diablos estas metido? Me tienes totalmente desesperado.

Yoongi lloraba al otro lado de la linea con los otros miembros detrás.

—Hyung... L-lo siento mucho.

—Dime donde estás, voy por ti.

Al decir la dirección, Jimin colgó la llamada y se sentó en un rincón a llorar sin consuelo; tenia frio y hambre y estaba lleno de miedo.
Lo único que quería era que Yoongi viniera lo más rápido posible.

Pasó todos esos largos minutos de espera llorando, hasta que un auto se estacionó frente a el.

Yoogi salió corriendo hasta quedar arrodillado en el pavimento al lado de su novio, seguido venia Jin con un abrigo enorme.

—Por Dios Park Jimin.

Jimin se sorprendió al ver él rostro del palido lleno de lagrimas y entonces fue abrazado y cargado hasta la tibia camioneta.

—Lo siento.

Era lo que decia en su cuello al cometer tal estupidez.

—Tranquilo, te llevaremos a casa —J-hope acarició su espalda cuando ya estuvo ubicado en las piernas de su mayor.

—Duerme un poco —Le decia Namjoon— Ya estas con Yoongi, el te cuidará.

—Duerme bebé.

Ela ultima voz que escucho fue la de su novio, acompañado de suaves caricias en su cabeza y el silencio total.

Entonces se quedó rendido.