Sin Admitirlo ShinobuxGiyuu

Calma

Todo era como siempre.
Tomioka estaba en una misión y shinobu se encontraba en la casa de las mariposas.
Tanjirou se había marchado hace poco tiempo y ella debía partir a su próxima misión al igual que el.
El cuervo le señaló a kocho lo que debía hacer, debía dirigirse al pueblo al norte de ahí y unirse a tomioka para vencer a un demonio, presuntamente una luna secundaria.

Sin tomarle mucho tiempo se alistó y fue rápidamente al lugar.

........

Faltaba poco para llegar y en unas pocas horas caería la noche. Le intrigaba la idea de hacer equipo con giyuu, el era muy reservado y casi no decía una palabra, recordaba la primera vez que lo vio, lo encontró  apuesto, pero sabía que esos pensamientos no tenían lugar en su vida, nada podía interferir con su verdadero objetivo. La venganza.

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- kocho shinobu está cerca - anuncio el cuervo de giyuu
El solo miro el lugar, como si buscara algo, el solo quería terminar la misión cuanto antes para irse a la siguiente.
Y por que también le atormentaba un poco saber que kocho estaría ahí cerca de el, y es que ella tenía una sinceridad brutal y un humor un tanto cruel, y esa sonrisa que el sabía que era solo una mascara.

-Tomioka-san..¿ya encontraste al demonio?- dijo una voz suave por atrás de el.
- aún no - respondió sin siquiera dirigirle la mirada a shinobu

Ella avanzó un poco intentando encontrar lo que giyu observaba con tanta concentración, lo miro a la cara con una sonrisa sin entender aún a giyu.

-creo que el demonio aparecerá aqui- dijo giyu- debemos estar alerta en todo momento.

Shinobu sin decir una palabra salto hasta el tejado de una casa, y se escondió entre la estructura.
El rato pasaba hasta que apareció, era simplemente la presencia, pero no podían verlo.
Giyuu trataba de buscar con la mirada donde se encontraba aquel demonio, pero la presencia aparte de ser muy fuerte, era muy confusa, se sentía en todo el lugar.
De pronto shinobu calló al suelo, inconsciente, al lado suyo. Estaba perplejo, al mirar hacia arriba no pudo ver nada, shinobu que estaba aun tendida en el suelo tenía una herida en el estómago, que entraba por su espalda, como una estocada.

- Creo que hoy me daré un festín- dijo el demonio parado justo detrás de el.

Giyuu giró usando su segunda postura de agua, pero al momento de percatarse el demonio ya no se encontraba atrás de el, sino que estaba al frente con shinobu tomada por el cuello listo para comerla.

¿Como era eso posible? ¿Tan débil era que no se había siquiera percatado a tiempo del cambio de posición del demonio?

- Eres un débil, incapaz de proteger a alguien- dijo el demonio rompiendo el cuello de shinobu.

Un silencio se apoderó de el, al mismo tiempo que la ira; sentía que podría morir en ese instante, pero no lo aria sin antes vengar la muerte de ella, estaba dispuesto a todo.
Un segundo basto para quedar frente al demonio, listo para cortar su cabeza.
Un llamado basto para despertar de aquel tormento.
.......

Shinobu estaba ahí viendo como la cabeza del demonio desaparecía, tomioka estaba tirado en el suelo con el torso cubierto de sangre. Aquel demonio podía abrir portales, tan rápido que se debía predecir sus movimientos para lograr atacarlo. Shinobu fue atacada primero, sin darse cuenta fue herida  en su hombro, y cayó al suelo justo al lado de giyuu y este por la sorpresa se descuidó, el momento justo para ser atacado por la espalda, el demonio al herirlo también inyectó veneno, el cual actuaba lentamente y lo hacía alucinar. Después de una larga lucha shinobu pudo deshacerse de aquella cosa.
..........

-Tomioka-san....tomioka-san....despierte...- decía la dulce voz de shinobu mientras el abría los ojos.

Ella estaba arrodillada al costado de el, con su cara tan cerca que podía sentir su respiración en las mejillas. sus ojos eran hermosos.

- Tomioka-San, creí que no despertaría nunca - dijo shinobu un tanto preocupada, sin dejar la corta distancia que los separaba - ya me estaba preocupando tomioka-San, de que el antídoto que le puse no ubiese funcionado.

- ¿cuanto tiempo llevo aqui?- pregunto al mismo tiempo que sus mejillas se tornaban Rojas, y es que ella seguía ahí, mirándolo fijo sin moverse ni un centímetro.

- Unas 2 horas tomioka-San, el sol ya va a salir en un rato, pero deberías quedarte ahí quieto unos minutos más hasta que el antídoto funcione completamente y puedas sentir tus manos - dijo dándole una sonrisa - estas algo sonrojado tomioka giyuu, no creo que sea parte de los efectos de mi antídoto, quizás es por el veneno.

- Yo.. tengo algo de calor- dijo de golpe, tratando de ocultar la verdadera razón de su rubotizado rostro, sentía un nudo en el estomago, como si quisiera besarla de pronto.

- esta bien- dijo shinobu mientras se ponía de pie - aquí es muy bonito no crees Tomioka-san?- ella estaba ahí mirando a su alrededor.

- Creo que fui más estorbo que ayuda - dijo giyuu tan serio como siempre

- La verdad es que si. ese demonio quería devorarte, pero me encargué de que eso no sucediera,ya todo acabo, así que deberías comenzar a entrenar más para no descuidarte si alguien cae a tu lado; debiste dejarme morir si era necesario tomioka-San- shinobu tenía esa sonrisa en el rostro, esa sonrisa que el sabía era falsa.

- No podría dejarte morir Kocho, te protegería aun que no me lo pidieras- dijo giyuu poniéndose de pie.

Shinobu estaba herida en el hombro derecho y en sus piernas, tenía unas cuantas heridas leves también en el torso, pero parecía como si no le afectara.
Su sonrisa desapareció y una mueca de duda apareció en su rostro.

- a que te refieres con eso Tomioka-san?, nuestra misión es matar a los demonios poniendo en juego nuestra vida, si por algun error caímos en combate tu deber esta puesto en la venganza y el honor.

Tomioka estaba un tanto paralizado por sus pensamientos y por sus sentimientos, esos que jamás había experimentado, ese fuego dentro de él que lo único que quería era abrazarla, pero aún no comprendía por que.
Se acercó a ella en un segundo, a la misma distancia invasiva que ella había usado, shinobu podía sentir su respiración en el rostro, y observaba atónita esos hipnotizantes ojos azules.

- Tienes razón kocho, pero aún así te protegería con mi vida- dijo giyuu con esa postura seria, sin dejar de mirarla a los ojos.

Era la primera vez que kocho sentía algo como lo de ese momento, sentía mariposas dentro de su estómago, se sentía un tanto nerviosa, pero ¿porqué?.

Después de un momento el tomo distancia,  sin decir una palabra, miro al frente.

- Deberíamos irnos, ya va a amanecer y estas herida- volvió la mirada hacia ella.

- Yo.. creo que la dosis de antídoto que me puse no hizo efecto del todo, siento mis piernas entumecidas, así que iré a paso lento, tu puedes seguir tu camino tomioka-sa.....- decía shinobu con una sonrisa en su rostro.

Giyuu se había percatado de que ella, al tener muchas más heridas que el había recibido una alta dosis de veneno, pero shinobu había decidido usar la mitad del antídoto en el, dejando atrás su propio bienestar.
¿Enserio ella había hecho aquello?
Después de sermonearlo anteriormente por su actitud al verla caer.
Giyuu en un impulso la tomo en sus brazos.
De inmediato el rostro de shinobu se tornó rojo y una cara de vergüenza se apoderó de ella, lo sostuvo por el cuello casi por inercia y giyuu, sin decir una palabra, comenzó a caminar.

- No...no es necesario tomioka-San- dijo shinobu ocultando la mirada.

- Tu me salvaste, me ayudaste, sin que lo pidiera, yo are lo mismo- dijo mirando al frente, y es que aún no se daba cuenta de lo que estaba haciendo.

- no es que la pudieses pedir, pero gracias, tomioka-San- dijo shinobu avergonzada.

Podía sentir sus manos, era primera vez que tenía un contacto tan cercano con un hombre, y este le causaba algo dentro de ella, algo que no sabía lo que era. Podía sentir el cabello de giyuu en sus dedos, podía sentir sus musculosos rozandola, y es que al verlo, comenzó a darse cuenta, que en verdad el era bastante guapo.
Cerca de el sentía calma.