Capítulo 9

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__________ pov.

Pasamos la tarde en la mansión junto a Valor.

Buscamos el libro para guiarme frente un nuevo enemigo o suceso que vaya a pasar.

—Estira tu mano—Valor me indico mientras leía el libro con confusión.

—Espera,  no entiendo lo que dice acá —me mostró el libro.

Y en definitiva, no era idioma español, era otro, pero aun así entendí lo que decía.

—Oh, es sencillo, dice que cierre mis ojos y me concentre en lo que quiera hacer—Hable mirando la pagina.

—De acuerdo—Valor fruncio el ceño.

Trague saliva y apunte hacia el mar.

Pues estábamos en la orilla de este pero aun dentro de la casa.

Deriva estaba arreglando el carrito de golf mientras Valor me ayudaba a mi a controlar mis poderes.

Subí ambas manos y fije mi vista en ellas poniendo demasiada concentración.

Levanta el agua.
Levanta el agua.
Puedo levantar el agua.
Puedo levantar el agua.

Repetí en mi cabeza con los ojos cerrados y la imagen de lo que quería hacer en mi mente.

Abrí los ojos e hice fuerza en mis manos.

Segundos después el agua se levanto haciendo un remolino de gran altura, con mis dedos controle esta dando vueltas y vueltas.

—Wow—Escuche la voz de Deriva.

Por ultimo aventé el agua y cayó de nuevo a donde pertenecía.

—Fue cansado—me queje y me di un respiro girando a ver a ambos.

—Si, date un descanso—Valor me dio una sonrisa.

Decidí sentarme cerca de Drift para ver que hacía.

Ajusto algunas cosas con un poco de fuerza y al final término.

—Listo—hablo después de varios minutos.

Frunci el ceño con confusión.

—Ya podemos irnos—volvio a hablar dirigiendo una mirada rápida hacia mí.

—¿Irse?—Valor se acerco mirándonos con cierta chispa de confusión.

Deriva asintió y de nuevo me miro, al igual que Valor.

Yo solamente me quede encogida de hombros.

—Yo pensé que se quedarían por si sucede algo con el cubo—La pelirroja se dirigió a Drift.

Este se tenso un poco.

—Por eso mismo nos vamos, le puede hacer daño o algo—

—¿A ella?—Valor me señalo con gracia.

—Si sabes que te puede hacer mas daño a ti que a ella, ¿verdad?—

Deriva rodó los ojos.

—Bueno no me siento cómodo aquí ¿si?—

—pues si quieres puedes irte, pero ________ se quedará—la chica se cruzo de brazos y se posicionó de manera firme, dando una vista de seguridad.

Deriva la miro con cierto fastidio y me echó una ultima mirada.

—¿Te quieres quedar?—pregunto y al instante valor se giro hacia mi.

Era demasiada presión, dijera lo que dijera uno de los dos me odiara por un cierto tiempo.

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