O29.

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Quince minutos era lo que habían esperado para que la Noria se detuviera y por fin llegara el turno de ellos y otras personas que estuvieron en la cola.

Jisung entrelazó sus dedos con los del pecoso y en poco de dos minutos ya se encontraban dentro de una cabina. Era sorprendente lo espaciosa que era con el tamaño que supuestamente tenía.
Ambos chicos se asustaron al no darse cuenta de que ya se estaban moviendo, y en realidad fue más bien por el ruido de la puerta de aquella cabina cerrándose, fue inesperado.

Al poco de veinte segundos las hermosas vistas que tenían desde ahí dentro era de ensueño.

ㅡ ¡Mira, Felix! ㅡ dijo con entusiasmo, al despegar su mirada de las bellísimas vistas, vio algo muchísimo más hermoso que hizo su corazón latir con fuerza.

Ahí, sentado, con sus pequeñas manos apoyadas en los cristales de la cabina y esa expresión en su rostro como un niño pequeño viendo golosinas.
No sabía cuánto tiempo había estado observándolo, pero podría quedarse así eternamente, por qué Felix era el ser humano más hermoso de este planeta.

ㅡ Cariño, mira... ㅡ y por fin miró a Jisung, quién ahora mismo se encontraba boquiabierto y como si llamas se hubieran prendiendo en sus mejillas.

Lo había oído bien, ¿verdad?

Cariño...
Cariño.
¡Cariño!

Aunque Jisung quería responderle, las palabras no salían de su boca y el pecoso mantenía esa mirada de felicidad, nada comparada a la de Jisung, un tonto enamorado hasta las trancas.

Y...

Jisung cogió la mano de su novio, acariciándole con ternura.

ㅡ No sé cómo lo haces, me vuelves loco cada segundo, cada minuto, cada día. ㅡ y no había nada más bonito que perderse en sus ojos.

Felix le dedico una sonrisa dulce.

ㅡ Somos dos.

freckles ➶ jilixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora