Desaparecido↪ Taeyu

Capítulo 13

Yuta siente nuevamente un fuerte dolor en su cabeza, esta vez no está sobre algo mullido sino que está en algo duro.

A lo lejos puede escuchar unas voces. ¿Serán las personas que lo seguían?

-Irene ¿está muerto?- pregunta una de las voces.

La neblina de la inconsciencia aún está en su mente por lo que no puede lograr distinguir aquella voz.

Un momento….¿Quién diablos es Irene?

-No está muerto Yeri- responde una nueva voz.

-¿Entonces por qué no despierta?

Se escucha un suspiro.

De apoco Yuta va abriendo sus ojos, ahora que ya está más consciente escucha ruido de agua, quizás pueda ser un río, además después de días logra escuchar pájaros cantar, quizás en qué lugar vino a caer.

Ya cuando sus ojos estuvieron completamente abiertos se da cuenta que hay dos chicas mirándolo atentamente, nunca las había visto, frunce el ceño al darse cuenta de que estas están descalzas y llevan túnicas blancas.

Se lleva una de sus manos a su cabeza por el dolor punzante.

-¿Te duele mucho?- pregunta una de las chicas.

-Un poco.

-¿Te sientes mareado?- le pregunta la otra chica.

-No….¿Dónde estoy?- pregunta Yuta mientras se endereza.

Se encuentra a escasos metros de un río, hay árboles y arbustos por doquier, y un exquisito olor a flores y húmedo.

-Estas en la entrada al cielo- responde una de las chicas como si nada con su rostro serio. Casual.

-¡¿Estoy muerto?!- pregunta Yuta alarmado.

-No, no, no estás muerto, solo te encontramos flotando inconsciente en el río.

Yuta se tranquiliza levemente ante la respuesta.

-¿Quiénes son ustedes?- Yuta pregunta mirándolas con curiosidad.

-Soy Irene y ella- apunta a la otra chica- es Yeri y somos….vivimos por aquí- responde nerviosamente Irene. Yuta la mira con ojos entrecerrados.

Yeri mira distraídamente hacia cualquier otro lado.

-Y dime…¿Cómo te llamas?- pregunta Yeri.

-Me llamo Yuta.

-¿Eres extranjero?- Irene lo mira curiosa.

Yuta suelta una risita divertida. Siempre es lo mismo.

-No soy extranjero, nací aquí, pero mis abuelos son extranjeros.

-¿De qué país?- vuelve a la carga Yeri.

-Japón.

-¿Qué hacías por estos lados?- pregunta Irene.

- Estaba huyendo de unas personas y no me di cuenta a tiempo de que había un precipicio.

A lo lejos se escucha el graznido de un cuervo.

Irene y Yeri se ponen de pie apresuradamente.

-¿Pasa algo?- pregunta preocupado Yuta.

-Nos tenemos que ir- responde apurada Yeri- es peligroso que te dejemos aquí, ven con nosotras.

No le dio tiempo a reaccionar cuando ya ambas chicas lo tomaron de sus brazos y lo levantaron, empezaron a correr con él a rastras a quien sabe dónde.

Escucha cada vez más cerca los graznidos del cuervo.

Atravesaron por una pared de enredaderas a un lugar desconocido. Irene suelta su mano y Yeri sigue caminando con el alejándolos de ahí. Irene una vez que están a unos metros recita un hechizo en dirección a la pared de enredaderas.