Después de que pasó la semana de San Valentín, Sarada dejó de recibir cartas. Eso le extrañó. Lo que quedó del resto del mes de febrero se fue en preparaciones para los exámenes de ingreso a la universidad. Al conversarlo con sus padres decidió que estudiaría para ser profesora de literatura. No quería ser una médica frustrada y prefería apostar hacia algo que le gustara, y eso era la literatura, nada más que eso. Sakura no tardó en ponerse de acuerdo y ayudarla a llenar los formularios correspondientes. La acompañó a rendir los exámenes como pudo. Ya que quedaba de paso y podía llevarla en su vehículo.
Marzo comenzó agitado. Sus compañeras estaban igual que ella, concentrada en los estudios y atareados por todo lo que implicaba esa época. Ya quedaba poco para la graduación. ¿Qué sería de la vida del chico de las cartas? Al final, ni siquiera pudo deducir quién era y solo rogó que esas cartas fueran falsas, porque de ser verdaderas, se sentiría arrepentida toda su vida en no haber podido salvar la vida de alguien.
Chouchou colocó algunos aperitivos delante de su cara y se sentó en la silla de enfrente con una sonrisa de oreja a oreja. No entendió su expresión hasta que habló:
-Adivina.
-¿Qué? ¿Ya terminaste el dorama de She Is Mine?
-No, eso fue hace como dos semanas-se defendió y recogió su cabello hacia atrás-. ¡Iremos a la misma universidad!-sonrió-miró que su amiga Sumire también se incorporaba-. De hecho, las tres lo haremos.
Sarada no sabía qué expresión poner. Sus ojos negros brillaron por unos instantes y le enseñó una mirada ilusionada a su amiga. ¡Irían a la misma universidad! ¡Eso sí que era una buena noticia! Seguirían juntas unos años más. ¿Cuánto tiempo sería? Unos cinco o seis años. Suficiente para poder verse casadas y con hijos. Bueno, tal vez no, no estaba segura de querer formar familia temprano o tener pareja. Lo dudaba mucho. Mientras ellas festejaban, Sumire dejó sus cosas en la mesa contigua, su expresión no parecía de la mejor. Tenía los párpados caídos y parecía angustiada. Sarada no tardó en percatarse. La miró preocupada:
-Sumire, ¿qué ocurre?
-Ah-corrió sus flequillos detrás de su oreja, algo distraída y volvió a poner el semblante caído. ¿Qué le pasaba? Sus ojos violetas se posaron en los suyos, no parecían ser los mismos de siempre, más bien eran algo tristes-. Sarada, ¿el chico de las cartas no te envió más cartas?
-Uhm, no. Más o menos desde hace un mes que no recibo nada de él. Ya sabemos que fue una broma, Sumire. No debo darle importancia...
Sumire frunció sus puños y una lágrima se deslizó por su rostro.
-Deberías recibir una carta más. Estoy segura-¿por qué lloraba? Se preguntó Sarada. Ahora estaba más preocupada. Se puso de pie.
-Sumire, ¿qué...?
-Oh-tocó sus mejillas mojadas y le sonrió-. No es nada. Solo entró algo en mi ojo. No es nada...-su voz se quebró-. ¿Saben? Decidí que no iré a la misma universidad. Me mudaré al norte de Japón. A Hokkaidou.
Eso era un cambio abrupto. ¿Qué le pasaba? De verdad estaba actuando extraña. Sarada levantó una ceja confundida y le pidió explicaciones, pero Sumire solo se excusó diciendo que era por el trabajo de su padre y la salud de su madre. Debía mudarse de Tokio para ir a un lugar más abierto y al campo. Eso parecía ser un justificativo suficiente para la pelimorada, pero solo ella sabía por qué lo hacía de verdad. Prefería no decirlo. Era por su bien.
- - - - -
Sarada no solo se preocupó por esas dichosas cartas. Las cuales empezaba a olvidar desde que Kakashi le dijo que el tipo que las enviaba era un idiota. El era su padrino y era su segunda autoridad después de sus padres, confiaba en él y en que lo hacía para protegerla. Lo que le preocupaba era saber que Boruto dejó de frecuentar el bar después de su rechazo. Era obvio, ¿no? Ella lo rechazó, ¿por qué tendría motivos para volver? No se sentía bien después de haberlo rechazado, sentía culpa y creyó que no merecía a alguien como ella. Suspiró. El era demasiado bueno para ella. Más sobretodo cuando lo prefirió ante un desconocido.
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Prohibido Olvidarte ( BoruSara )
Fanfic《"Prohibido Olvidarte" Eso fue lo que me grabé en la memoria... Y me prometí tenerte a mi lado una vez más... Porque no soporto que estés lejos.... Por favor, no te olvides de mi... 》 - - - - Sarada recibe cartas de un desconocido, el cual no so...