Mirame a los ojos

Incertidumbre

Nunca pensó que el tiempo podía pasar tan lentamente. La gente no se movía, el aire pesaba, y aún no había conseguido que su móvil cogiese cobertura. Maldecía en su interior. Ace, solo podía pensar en el. Nunca creyó en Dios, pero solo podía rezar para que el joven estuviese bien. No podía perderlo, su corazón latía desesperado. Arrepentimiento por todas las cosas que nunca admitió que sentía, su sonrisa, su descaro. Como podía negar que lo amaba? Que lo deseaba más que a nada en el mundo? Joder...-pensó.

Hasta que no salió del aeropuerto y subió a un taxi no consiguió que el móvil cogiese señal. Y ahí sus terrores se hicieron realidad. Tenía solo un mensaje con una dirección.

"Hospital Sagrado Corazon"

Pensó en llamar a Edward o Jozu... A alguien, pero no estaba seguro de querer saber nada.

-Señor ya hemos llegado.

Marco miró por la ventanilla como en trance.

-Gracias.- pagó al taxista y salió hacía el hospital.

Solo hacía unas horas de la llamada con Jozu, pero le parecían años.

Entró por la puerta y se dirigió hacia recepción sin saber qué preguntar. Pero antes de que pudiese abrir la boca una horda de gente entró corriendo escoltando una camilla. Un médico de cabello negro y tatuajes gritaba órdenes a su alrededor. Fijándose en la camilla reconoció al paciente.

-Ace!

Pero la comitiva pasó corriendo sin darle tiempo a reaccionar, cuando iba a salir corriendo detrás una mano lo detuvo.

-No puedes hacer nada, has llegado más rápido de lo que pensaba.

-Que ha ocurrido?

-Lo siento Marco, Ace recibió una bala mientras intentaban huir.

Un joven de cabellos dorados le cogió de las manos y empezó a balbucear palabras de disculpa mientras sus ojos estaban anegados en lágrimas.

-Es culpa mia, lo siento tanto.

Marco no entendia nada. Ace, estaba bien? Balbuceando solo consiguio decir,

-Pero... Ace?

Jozu intentó explicarle pero Marco no escuchaba. Después de saber que habían disparado a Ace que solo le quedaba esperar su cerebro había desconectado de todo.

Marco estaba sentado con la cabeza sobre sus manos cuando Edward llegó.

-Alguna noticia?

-Sigue en el quirófano, tiene pinta de que va para largo.

-Entonces pongámonos en movimiento, no pienso quedarme esperando.

Cogiendo a Marco del hombro le dijo:

-Es hora de acabar con esto.

Edward les guió hacia una sala de reuniones, como había conseguido ese hombre una sala de reuniones para ellos en un hospital era un misterio, pero nadie cuestionaba a Barbablanca.

En la sala solo se encontraban cuatro personas físicamente pero rápidamente en las caras de Koala y Robin aparecieron en la pantalla del fondo de la sala. También oyeron como dos más se unieron solo audio en este caso.

-Qué es esto?- preguntó un Marco confundido.

-Mientras tú volabas empezamos la operación, Ace solo fue un intento de chantajear a Barbablanca, pero eso solo era la punta del iceberg.-empezo |Sabo.

-Hagamos un resumen para los que al parecer no están enterados de lo que ocurre- dijo fríamente la pelinegra desde la pantalla- Aquí Robin de los Mugiwara reportando.

-Un momento la conexión será segura?-preguntó la pelinaranja desde el otro lado de la pantalla.

-Acaso dudas de nuestras habilidades?

-Solo preguntaba.

-Continuo, Operación Flamenco negro, todo empezó cuando se reportaron acercamientos entre la banda de barbanegra y la familia Donquixote, como todos sabemos Barbanegra ya tenía rencillas con la banda de Barbablanca. Nuestros informes vieron un movimiento de acercamiento entre estos dos bandos y empezamos a seguirlos de cerca.

-Pero qué tenéis que ver vosotros con todo esto?-preguntó un Marco confundido.

-Eso no es relevante- contestó secamente la pelinegra.

-Como que no es relevante? Que hace la mayor organización de hackers envuelta en algo así?

-Intereses comunes contra la familia Donquixote, no necesitas saber más. Como iba diciendo, nuestros intereses comunes nos llevan aquí, Mugiwara's, Barbablanca y TRA "The Revolutionary Army". Interesante como veis, por suerte ninguno de nuestros bandos tiene nada en contra del otro, y estoy bastante segura que TRA tendrá el respaldo del gobierno como siempre para hacer desaparecer todo rastro de lo que ocurra en esta operación, me equivoco?

Una voz salió por el altavoz.

-No dudes de ello, continua.

-Gracias por la confirmación Dragon, sigamos, en estos momentos mis compañeros están vaciando las cuentas de ambos bandos para no dejarles salida mientras dos equipos se dirigen a las localizaciones donde hemos rastreado a los cabezas de ambas organizaciones para proceder con la eliminación.

-Equipo Rosa acercándose a posición.- se escuchó la voz de Jozu a través del altavoz.

Marco miró a su alrededor, cuando Jozu había desaparecido del hospital?

-Equipo negro en posición esperando confirmación.-Dragon replicó.

Robin hablo con alguien a su espalda y continuó.

-Estáis aquí como testigos, ahora compartiré con vosotros en vivo de lo que está ocurriendo, hemos equipado a todos con cámaras en los chalecos. A partir de ahora seréis meros espectadores hasta que esto acabe.

Edward asintió y cruzó sus dedos encima de la mesa atento. Sabo también miraba la pantalla mientras mordía nervioso un lateral de su pulgar.

Marco seguía estupefacto, que era todo aquello, por que habían disparado a Ace, pensaba que Edward ya no estaba involucrado en nada turbio, cuánto tiempo hacía que había perdido el hilo de lo que ocurría en la familia, cuando había vuelto Teach a la ciudad. No entendia nada, y su preocupación no hacía más que crecer.

En la pantalla podía ver en directo como las armas de fuego no dejaban de resonar, cuerpos cayendo al suelo, órdenes gritos. Koala guiando al equipo Negro y Robin al Rosa, era lo único que sabía por los marcadores en la pantalla. En su cabeza solo podía pensar en Ace y en si seguiría vivo.

Ace, el pequeño Ace, al que vio crecer, el cual se estremecía cada vez que posaba su estetoscopio en su blanca piel, esa piel tan suave, podía escuchar su risa, su fresca risa. Cada uno de los recuerdos felices que tenían juntos, como Ace le besó con fuerza y desesperación, cuando encontró a Ace durmiendo a su lado, y lo suave que era su pelo. Maldito niño, y maldita sociedad. Las lágrimas empezaron a correr por sus mejillas no podía perderlo, no ahora que había decidido mandarlo a la mierda todo y finalmente abrir su corazón. Edward le miró desconcertado y le hizo una señal a Sabo para que lo sacara de allí.

-Estás bien?

-No es nada, vuelve dentro, me quedaré aquí por si hay noticias sobre Ace.

-Entendido.- el rubio se alejo dejando a Marco sentado en la sala de espera.

No sabía cuándo se había quedado dormido, pero su cerebro jugando con él le hizo soñar con la noche en la que todo empezó a ir mal, cuando vió como Ace se acostaba con otro que no era el. Una mano en su hombro le despertó, esa mano, con tatuajes, recordaba esa mano, era la misma que agarraba las caderas de Ace. Aun somnoliento y dejándose llevar por los celos se levantó y agarrando al otro hombre dijo:

-Todo es culpa tuya-mientras su diestra chocaba contra la mandíbula del desconocido.

Law cayó al suelo desconcertado mientras dos seguratas agarraban a un Marco aún en un mundo distorsionado entra la realidad y los sueños.