Irremediablemente Tú y Yo

25. Crazier.

"You lift my feet off the ground, you spin me around
You make me crazier, crazier."

—Taylor Swift (2009).

BROOK

Después de una de las mejores noches de mi vida, despertar sintiéndome tan feliz se siente extraño. Pero extraño en un buen sentido.

No voy a mentir y decir que no estoy nerviosa por lo que pueda pasar hoy, incluso me regaño internamente por sentirme así cuando no debería.

Adrien sigue siendo mi amigo, al menos frente a los ojos de los demás, así que no pueden haber grandes cambios ¿Verdad?

Sigo procesando el hecho de haber sido yo quien le pidiera mantener esto en secreto, como una excusa pobre de enmascarar mi temor. Temor a que Matt se tome de mala manera esto, y no porque me importe lo que piense, sino porque es el mejor amigo de Adrien, alguien a quien considera un hermano. Además, también está el resto de las personas que, de por sí ya piensan que soy una zorra por meterme con un chico con novia, ¿cómo se lo tomarían si supieran que ahora salgo con su mejor amigo?

Y todo eso solo es la punta del Iceberg, porque no sé qué pensarían nuestros amigos, así que no, no estoy preparada para nada de lo que pueda suceder si alguien más se entera.

Aun así, creo que comienzo a sobre pensar las cosas, nada de eso va a suceder a menos que funcione lo que tenemos, si no lo hace, seguiremos como lo estábamos antes, y todo será igual. No debo preocuparme más de la cuenta y debo concentrarme en disfrutar todos los momentos en los que estemos a solas, solo él y yo.

Despejo mi mente de esos pensamientos abrumadores y salgo de las sábanas para prepararme para el día.

No me molesto en planchar mi cabello porque con la humedad que hace lo más probable es que se vuelva un desastre más tarde. En cambio, dejos mis ondas al natural y me coloco unos jeans negros y unos tenis y chamarra blanca, también me coloco una bufanda gris y guantes negros.

Avery, como todos los lunes ya no se encuentra en la habitación por lo que me apresuro para alcanzar a llegar a la cafetería por algo caliente.

Al salir de la residencia, el aire frío golpea mi rostro y maldigo por lo helado que está, sin embargo, el olor a tierra mojada disminuye el sentimiento y camino mucho más rápido para llegar a la cafetería que frecuentamos.

Como ya lo suponía, mis amigos se encuentran en la mesa de siempre, así que no pierdo el tiempo en acercarme.

—Buenos días —los saludo y dos pares de ojos me miran con cara de pocos amigos.

—Sabes que te adoro, pero dime, ¿qué tienen de buenos si es un lunes por la mañana? —Chris habla con tanta irritación que me hace sonreír aún más.

—Que estoy aquí, obvio —contesto, dando un encogimiento de hombros y sentándome a lado de Adrien quien tiene el brazo extendido sobre el respaldo de mi asiento.

Escucho la leve risa de Matt, Justin deja salir un sonido nasal y hace una seña con la cabeza al pelinegro.

—Te está contagiando su ego.

Chris lloriquea.

—No voy a soportarlo, tú no, Brookie. ¿Sabes lo difícil que es vivir con el ego de Adrien? Es... —se echa aire con la mano—. Asfixiante.

Río.

—Eres un exagerado —le digo, poniendo los ojos en blanco.

—Buenos días, Brook —contesta Matt, riendo por las ocurrencias de su amigo.