Cuando la obsesión se convierte en tortura - JoRey

Capítulo 5

La luz interrumpió su dulce sueño, entrecerró levemente sus ojos e intentó pararse pero un cuerpo se lo impedía, dirigió su mirada aquello que no dejaba moverse y al darse cuenta su rostro se volvió completamente rojo. Su amada Alicia estaba abrazándolo mientras dormía plácidamente, su cuerpo estaba totalmente desnudo y se reflejaba como obra de arte unos pequeños chupones en su piel.

Joey no pudo evitar sonreír por semejante arte, el amor de su vida había aceptado sus sentimientos y afortunadamente ella sentía lo mismo por él. Tranquilamente el muchacho empezó a dejar caricias en el rostro de su amada, pasaron unos 10 minutos y su amada había despertado.

— Buenos días. - Dijo el sonriente para después depositar un tierno beso en la punta de la nariz de Alicia.

Ella sonrió por tal acto.

— Buenos días. - Respondió ella y miró fijamente los bellos ojos de Joey. — ¿cómo amaneciste, cariño? - preguntó la chica sin dejar de ver a su querido amor.

— Bien, ¿y tú amor? - Respondió, ella simplemente asintió como repuesta dando a entender de que estaba bien. — Deberíamos bañarnos, ahora que lo recuerdo estamos en casa de Sid y nos matará si nos ve así. - Dijo bromista Joey, después de decir esto ambos se levantaron de la cama y se dirigieron al baño.

Luego de 25 minutos ambos ya se encontraban saliendo del cuarto de baño envueltos en toallas, se dispusieron a vestirse y salir de la casa.

— ¿Qué te gustaría hacer? - preguntó el muchacho.

— Podríamos ir a un café para desayunar juntos y pasar tooooodaaa la tarde juntos. - Respondió ella feliz mente para luego abrazar a Joey, este sonrió por tal acción y pensó "que tierna es". Y como dijo la muchacha ambos desayunaron entre risa y secretos, obviamente Joey no hablo sobre lo que pasado con Corey, aquella amenaza lo tiene asustado, no por él si no por Alicia, si algo le pasara no se lo perdonaría jamás.

Llego la noche y ambos se encontraban paseando por un parque. — Fue el mejor día de mi vida, enserio, el mejor que he tenido en años. - Habló ella muy contenta por estar por fin con Joey, este solo se limitó en reír levemente, estaba tímido.

— Oye Alicia. - el paro de caminar y la chica puso total atención a Joey. — Me preguntaba si te gustaría ir a vivir a mi casa, se que es muy pronto pero la verdad me gustaría estar contigo por siempre, he estado enamorado de ti por más de 2 años y quiero pasar siempre la mayor parte a tu lado, que dices, ¿te gustaría vivir conmigo? - término de hablar y la chica se lanzó hacia él dándole un gran abrazo y respondió con un "Claro que quiero" todo esto lo presencio la vacía y fría mirada de Taylor.

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Ya a pasado 2 meses desde que Alicia y Joey viven juntos, han creado lindos y malos momentos como en cualquier pareja que tiene que enfrentar los problemas. Su relación va mejorando día a día y todo ha parecido muy tranquilo, durante esos 2 meses Joey no ha visto a Corey y tampoco a pensado tanto en él, lo cual lo llena de tranquilidad, lo más probable es que decidió dejarlo tranquilo.

— Cariño, ¿podrías ir a comprar al mercado? Necesito algo más para que el almuerzo esté listo. - Dijo Alicia, Joey aceptó encantado.

— Volveré muy pronto amor. - Habló y depositó un beso en la frente de su amada para después salir he ir al mercado. Decidió ir caminando, no tenía prisa.

Al llegar al establecimiento buscó el ingrediente que le faltaba a su novia, al no encontrarla decidió llamar a su amada para poder preguntarle qué otra cosa podría llevar.

— Oye amor, sabes no lo encontré que otra cosa podría llevar. - preguntó esperando una respuesta de la contraria.

— No lo sé cariño. - aquella voz no era su amada, un escalofrío recorrió completamente su cuerpo, era Corey.

— C-Corey... - Dijo su nombre con notorio miedo. — ¡¿dónde está Alicia?! - exclamó, deseaba con todas sus fuerzas que ella se encontrara bien.

— Ooh ella... - miro al cuerpo desmayado de la muchacha. — está desmayada. - Respondió sin más Corey.

— ¿¡Qué fue lo que le hiciste?! - volvió a exclamar Joey, estaba molesto. — ni se te ocurra ponerle un dedo encima. - Joey ya se encontraba saliendo del establecimiento con paso apurado para llegar lo más antes posible a su casa.

— Tranquilo, no le haré nada... por ahora. - al terminar de decir esto una ligera risa se hizo escuchar. — Ven pronto amor mío, te tengo una sorpresa. - y se corto la llamada. Joey rápidamente guardó su teléfono y empezó a correr, necesitaba llegar lo antes posible.

Al llegar a su hogar abrió la puerta y se encontró con Alicia atada y durmiendo debido a que aún se encontraba desmayada, decidió ir con ella pero una mano junto un pañuelo se hizo presente y le tapó su boca y nariz. Obviamente se trataba de Corey intentando desmayarlo con el cloroformo, Joey aguantó la respiración para que aquello no le hiciera efecto y pataleo para poder zafarse del agarre del mayor lo cual era imposible ya que Corey era mucho más fuerte, pasando unos segundos Joey ya necesitaba aire y no le quedó de otra que aspirar el dichoso cloroformo, pasado unos 5 minutos el menor cayó inconsciente.

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Joey despertó en una habitación vacía, tenía un ligero dolor de cabeza. — Joey, menos mal que despiertas ¿en dónde estamos? - aquella voz que amaba tanto se hizo resonar en el lugar volteó levemente así mirada a la derecha encontrándose con su amada semidesnuda, solo tenía su ropa interior, para suerte de Joey, él estaba totalmente vestido.

— ¡Alicia! ¿Estas bien?¿no te duele nada? - Habló preocupado Joey, Alicia negó con la cabeza. — Amor, no sé dónde estamos pero juro que saldremos de esta. - Al terminar de decir esto la puerta se abrió dejando ver a Corey.

— Los bellos durmientes ya despertaron. - Dijo esto con una inocente sonrisa. — ahora empezar a jugar con esa preciosa dama. - término de decir Corey.

Comenzará otra vez el infierno de Joey y ya no sabe como detenerlo.

1010 palabras.

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