Los problemas no vienen solos

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|Narradora|
Los dos jóvenes salieron del departamento con su destino en el supermercado, ambos sonriendo cuando su mirada se cruzaba, era habitual que sus manos entrelazaran pero cada vez que lo hacían su corazón se aceleraba como si fuera la primera vez.
El menor peliceleste inició la conversación.
-Karma, estoy preocupado, ella suele enfermarse mucho pero está vez la noto diferente, como si estuviera ¿Triste? Pero no es la clase de tristeza que eh visto antes, no dejo de pensar en su mirada se veía tan vacía.
-Nagisa, quizás hubo algo que la afecto en su trabajo o alguna cita fallida, recuerda que la paz mental también afecta tu salud, si no la tienes tú enfermedad se agrava, aunque sea una simple fiebre- respondió karma mientras dejaba en el carrito de compras algunas frutas, y demás.

Nagisa solamente mordió su labio en símbolo de que había escuchado pero no lo había logrado convencer, tomó la leche del gran refrigerador que enfrente de él se encontraba, sus manos soltaron el envase  abandonando el frío plástico y dejándolo caer al suelo, despertando la mirada de algunas personas que pasaban por el pasillo.

Antes de que karma pudiera preguntar algo y sin importarle que su novia se había agachado a ayudarle a levantar el líquido antes de que se derramará, Nagisa tomó ambas manos de karma llevandolas a su pecho, soltó 4 palabras en forma de pregunta que serían las últimas en pasar por la mente del chico.

"¿Y sí está embarazada?"

-Nagisa, cariño, que cosas dices... No lo creo.
-Piensalo, karma- insistía.

Karma levanto el envase y lo acomodó en su lugar, tomó la mano de Nagisa y acomodó sus manos en el carrito para así este le ayudará a empujarlo y estar más cerca de lo que antes estaban.

-Supongamos que fuera así, ¿Por qué habría de tomarselo con tristeza?- preguntó incrédulo.
-Ella no tiene una relación formal, quizás le afectó el pensar que el padre de su hijo no lo acepté-
-Nagisa, No te apresures a las cosas, quizás debas de hablarlo con ella, es posible que solo fuera parte de su fiebre el aura deprimida con la que llegó.

Los chicos se apresuraron para terminar las compras, llegaron a casa, Nagisa corrió a la habitación de su tía pero está se encontraba durmiendo plácidamente, sonrió un poco el chico, y dejo el vaso con te que había preparado, en el pequeño mueble que acompañaba a la cama, justo a su lado se encontraba el bolso de la mujer que ahora dormía, de él sobresalía un sobre amarillo, sin malicia de espiar, lo tomó.

Saco el papel que en el se encontraba, se dió cuenta que este estaba arrugado, como si alguien lo hubiera tomado con enojó o frustración.

"Si solo es una fiebre, ¿Por qué esto es del hospital?" Pensó el chico.

Sus ojos iban postrandose por cada letra, leyendo con lentitud pues cada palabra le hacía tener una sensación de insertidumble y algo en su estómago le advertía acerca de un mal presentimiento.

-Nagisa, ven- grita karma desde la cocina, -oh, ahí estás, prefieres comer est... ¿Pasa algo? Estás pálido...- preguntó preocupado acercándose a su compañero.
-Es cáncer. No hay bebé, karma, Es... Cáncer-

Hola, hola chicos~, eh descuidado tanto mis historias, pero estoy atravesando por constantes "situaciones" que prefiero que no afecten la trama de la historia dando a mis personajes el estado de ánimo con el que me encuentro.
Espero que sigan apoyando la historia, aún tenemos capítulos por ver ¿O no?
Dejen sus votos, gracias ❤️ y disculpen errores

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