¿Qué pensarías si te dijera que tendrás un guardaespaldas, gracias a tu mal comportamiento, pero realmente es un chico bastante atractivo y sexy?
Te sigue a todas horas y no te respirar, pero al paso de los meses te empieza a parecer más que atracti...
Holaaa mis bebus, quiero hacerles saber que ésta historia tiene 60 capítulos y que aún le falta para estar terminada. Además, se irán publicando cada capítulo cuando la meta esté alcanzada.
Les aclaro porque hay chicas que me escriben al privado para saber si tendrá segunda temporada o si he pensando en hacerla y para acabar con sus dudas, sí, ésta historia tiene segunda temporada😘
Gracias por su atención.
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K. Nahyun
Lo miré atónita.
—Jung Kook, esto no es un juego. —Él me miró divertido y desvió su vista hacia el frente. Íbamos de camino a la perdición— Responde, ¿A dónde vamos? —Le exigí una respuesta.
—Iremos de paseo. —Alcé una ceja, esperando a que me diera más información— Tú ganas. Iremos a visitar a una persona muy especial para mí en una clínica, ¿Contenta? —Cambió su rostro a uno muy serio.
¿Qué demonios le pasaba? Aparte de que no podía tener un contacto visual conmigo decente porque iba conduciendo, se enojaba por nada, sólo quería saber a dónde me llevaba.
¡Que bipolar!
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02:45 PM
Después de estar, prácticamente, una hora dentro del auto en marcha y con cero paradas, llegamos a la famosa clínica que Jung Kook tanto deseaba llegar desde un comienzo.
Bajó del auto rápidamente para abrir mi puerta como todo el caballero que era y al salir no tomé su mano cuando me la brindó, más bien, pasé de él.
Se lo merecía por imbécil.
Caminamos hacia la entrada donde estaba un hombre más bajo que él, castaño, parecía extranjero por carencia de rasgos asiáticos, a no ser que sea como yo que no se parece a nadie y menos heredó esos rasgos tan peculiares; espalda ancha, de tés blanca, ojos de color azules fusionados con un poco de verde y con un traje perfectamente planchado.
Debía trabajar como Jung Kook, siendo un guardaespaldas.
—Hola, señor Jeon —Aquel hombre realizó una reverencia y volvió a su posición erguida como la de hace unos segundos atrás.
