¿Eʟ Gᴜᴀʀᴅᴀᴇsᴘᴀʟᴅᴀs? || ᴊᴇᴏɴ ᴊᴋ. ❬✔❭

➵┆Cᴀᴘ. 54┆sᴀʟᴠᴀᴄɪᴏ́ɴ.

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J. Jung Kook

     —Jin, no me hagas esto —Tomaba de su mano con cierto temor, veía morir a mi mejor amigo, frente a mis putas narices.

     —No lo hagas más difícil, vé por mi esposa... —Fue interrumpido por un gran ruido.

     Personas estaban adentrándose a la casa, cerré los ojos, rezando de que no nos hayan visto y no terminaran con nuestro sufrimiento.

     Maldita sea.

     —¿Te hiciste en los pantalones? —Cuestionó aquella voz— Abre los ojos, Jeon —Su risa era inconfundible.

     Abrí los ojos junto a una cara de sorpresa.

     —¿Qué haces aquí, YoonGi? —Pregunté suspirando.

     —Jamás dejaría sólo a un amigo. —Me extendió su mano para estrecharla— Claramente, no vine solo —El resto de mis amigos entraron por esa puerta.

     —¿Me extrañaste, guapo? —BamBam se veía gracioso con una escopeta.

     Sólo sonreí, no se pudieran imaginar el alivio que llegué a sentir en ese preciso momento.

     —Está herido —YoonGi asintió e hizo unas señas bastante extrañas, complicadas para mí entendimiento.

     —YuGyeom y BamBam se lo llevarán —Dijo el líder de aquel grupo.

     YoonGi, aunque sea un dolor de huevos, era el más inteligente y con el mejor corazón de todos.

     Los anteriormente mencionados, se acercaron a mí levantando a Jin para llevárselo a emergencias, necesitaba que un doctor lo viera lo antes posible si era que quería vivir. BamBam tomaba el torso mientras que YuGyeom tomaba sus piernas, viendo así como salían por la que se podía decir puerta.

     —¿Y ahora? —Preguntó Jackson sosteniendo su arma de forma sexy.

     —Salvaremos a la futura esposa de este niño hormonal —Mandó Jinyoung con los brazos cruzados.

     —Mientras yo vigilo la entrada, así que vayan. —Tomó su arma y apuntó hacia la entrada. Kang Daniel era todo un caso— ¡Vayan!

     Dicho y hecho, caminé junto a YoonGi, Jackson y Jinyoung en dirección a las escaleras, mi padre estaría en el segundo piso en su "habitación segura" o eso decía y alardeaba a cada rato. Mientras subíamos unos hombres nos esperaban al final de las escaleras apuntandonos con sus armas, sin pensarlo, comenzamos a disparar sin control alguno, ellos no iban a interferir en mis planes, no estando tan cerca.

     Al estar arriba, examinamos el perímetro, estaba limpio, literalmente. Caminé antes que ellos, tomando una de las armas de aquellos hombres que ahora se encontraba en el suelo.

     —¡Justo en su cara! —Gritó YoonGi con orgullo, todo estaba bien, incluso controlado hasta que escuchamos un disparo de un arma que no era nuestra.

     Giré con miedo y lo que ví me horrorizó, YoonGi tenía una de sus manos en su pecho mientras la sangre escurría de su gran herida. Me acerqué con rapidez, examinando la situación, lo giré para saber si la bala lo había atravesado, pero no era el caso.