¿Eʟ Gᴜᴀʀᴅᴀᴇsᴘᴀʟᴅᴀs? || ᴊᴇᴏɴ ᴊᴋ. ❬✔❭

➵┆Cᴀᴘ. 10┆ʟᴀ ғɪᴇsᴛᴀ (ᴘᴀʀᴛᴇ #2).

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K. Nahyun

     01:10 AM.

     —Eres muy hermosa, más de la que había imaginado. Tienes una dulce voz y sobre todo, unos labios exquisitos —Detallaba sus carnosos labios, mientras me sonrojaba por sus palabras ¿Por qué era tan lindo?

     —Tú... —Buscaba las palabras exactas para describir lo que mis ojos estaban observando, ahí frente a mí sin censura.

     A veces pensaba que tenía un gran problema para expresarme.

     —Lo sé, soy muy guapo —De la nada me lanzó un beso.

     Me tomó desprevenida y sólo me quedé a admirar tal muñeco de porcelana, de piel frágil y delicada, simplemente perfecto.

     —Entonces, ¿Nos vamos? —Volvió a preguntar y sin pensarlo dos veces, asentí.

     Mi espíritu aventurero salió a flote y como si no tuviese miedo de que pasara después, estaba segura de que quería continuar.

     —No me lo perdería —Intenté no sonar emocionada, aunque podría saltar de la emoción.

     ¡Aventura, voy por ti!

     Me extendió su mano y sin dudarlo la tomé, nos levantamos de la cama que, prácticamente no usamos y caminamos hacia la puerta, le agradecimos al chico que estaba junto a la misma o mejor dicho, el responsable de que no pasara cosas indeseadas en tal juego y salimos en busca de nuestra aventura. Visualicé a los chicos, me miraban sorprendidos, sólo extendí mi mano libre y la agité, despidiéndome de ellos, total, hoy era sábado.

     Atravesamos ese pasillo con menos gente transitando en el, hasta llegar a la tan esperada puerta principal, salimos y literalmente corrimos hacia su auto, cuando estaba apunto de abrir la puerta, una voz interrumpió de forma repentina mi acción.

     —Me gustaría saber, ¿A dónde vas?--- Esa maldita voz.

     Sólo duró unos minutos mi felicidad.

     Jung Kook no podía arruinar mis planes, hoy no. Estaba apoyado en una de las paredes exteriores de la casa, casi al lado de la puerta, que daba a la acera de la calle.

     —No es de tu incumbencia —Respondí. Jin sólo me miraba incómodo por la situación y además, él no comprendía que pasaba.

     —¿Qué no lo es? —Aquí vamos. Jeon Jung Kook haciéndome una escena.

     Dejó de recostarse de tal pared y caminó en dirección hacia nosotros.

     —¿Es tu hermano? —Preguntó Jin alzando una ceja. Negué y bajé la cabeza mirando hacia el suelo, que parecía ser más interesante que mi absurda discusión con Jung Kook.

     Tenía mucha vergüenza y él sólo se acercaba furioso hacia nosotros con pasos agigantados.

     —No, soy su guardaespaldas —Respondió a centímetros de mí. Quería morirme, ¿Por qué lo hacía?

     —¿Tienes un guardaespaldas?, ¿Por qué? —Jin estaba más desconsertado que todas las personas juntas en aquella fiesta.

     —Por su mal comportamiento —Respondió él susodicho con una ceja alzada.

     —Me hablaba a mí —Lo miré furiosa, mientras le pedía a gritos que se fuera de mi vista.

     —Lo sé, pero eres menor de edad y estás bajo mi responsabilidad, así que las preguntas las contesto yo, ¿Te quedó claro? —Abrí mi boca, bastante leve, ¿Y ahora que se cree?, No estuvo molestando estás semanas y justo hoy tenía que hacer su drama.

     —Nahyun, deberías ir a tu casa, quizás quedamos otro día para salir —Jin no parecía nada cómodo en tal situación, sólo se apoyó en el techo del auto, viendo el espectáculo.

     —Por fin, el hombre dice algo y bastante coherente —Jung Kook empezó a aplaudir.

     Sin dudas, él enloqueció.

     —¡QUE TÚ NO DECIDES POR MÍ! —Grité, sin importar que personas estuvieran presentes, además de nosotros.

     Él rió irónicamente.

     —Ahora si, eres tan estúpida a veces —Me tomó del brazo e intentó arrastrarme.

     —¡BASTA, JUNG KOOK, ME LASTIMAS! —Logró arrastrarme unos centímetros del auto de Jin, su agarre era muy fuerte, estaba más que segura que mañana me saldrán varios moretones.

     —Suelta a la chica —Pidió de forma calmada Jin, separándose del auto, mientras se acercaba lentamente hacia nosotros.

     —No te acerques —Suspiró tranquilo— No quiero hacerle daño, sólo cumplo con mi trabajo —Sin más, Jung Kook se ¿Agachó?, No lo sé, lo último que sentí, fue que me cargaba como un costal de papas encima de su hombro izquierdo, mientras con una de sus manos bajaba la falta de mi vestido, en resumidas cuentas, tenía su mano en mi trasero— Buenas noches —Agregó y comenzó a caminar en dirección a nuestro auto.

     —¡Gracias por todo, Jin! —Sólo alcancé a decirle eso, no tenía su número y mucho menos la dirección de su casa, realmente no tenía ¡NADA!

     Minutos después, ya estaba dentro del auto y con el cinturón puesto.

     —¡SE SUPONE QUE DEBERÍAS AYUDARME! —Grité eufórica. Lo iba a matar y no a besos exactamente.

     —No me grites —Dijo tranquilamente, mientras encendía el auto.

     —¡NO LO HAGO! —Grité de nuevo.

     —Estás pasada de copas y te ibas a ir con un hombre que sólo quería tener sexo contigo —Puso en marcha el auto. Lo miré atónita— Si no sabes lo que es, te lo explico de otra forma —Tomó aire y lo exhaló de manera rápida, muy poco natural— Te quería coger, percutar, meter su pepino en tu bizcocho, ¿Ahora si lo captas? —Lo miré con los ojos bien abiertos, ¿Me cree tan tonta como para no saber que significa tener sexo?

     —Sólo cállate —Fueron mis últimas palabras, mientras volvíamos a casa.

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J. Jung Kook

     01:50 AM.

     Nahyun, aunque no había bebido mucho alcohol estaba en otro planeta y fuera de sus cabales. Al llegar a la casa, se quedó profundamente dormida, sin más remedio, me tocó cargarla hasta su habitación, desvestirla, quitarle los tacones y por supuesto, acostarla en la cama, ¿Por qué no puedes hacer mi trabajo más fácil? Necesitaba el trabajo para... Aún no podía hablar de eso sin derramar ni una lágrima, pero era hora de hacerme el fuerte. Salí de aquella habitación, dejando a la niña en su cama, sana y salva.

     —¿Cómo estuvo? —Habló Taehyung recostado del marco de su puerta. No saben el susto que causó en mi interior.

     —¿Qué cosa? —Pregunté desconsertado. Estaba enfocado en mis pensamientos.

     —La fiesta, Kook —Dijo como si me conociera de toda la vida.

     —¿Cómo sabes que ese es mi apodo? —Lo miré confundido, sólo una persona me llamaba así.

     —Porque yo lo sé todo.

     Aquellas palabras no salían de mi cabeza, ¿Qué se supone que sabía? Cerró lentamente la puerta de su habitación, mientras que yo, me dí la vuelta y empecé a caminar hacia la mía.

     Día de locos.

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Disculpen si el capítulo quedó aburrido, el otro estará mucho mejor, se los puedo asegurar.

Gracias por leer♥️

CORREGIDO: 30/08/2020.