Cuando el rebelde e independiente Luke Hemmings conoce a Alex Maddox, queda sorprendido por su rechazo y su falta de interés hacia el y decide encontrar la razón por la que ella es tan fría y arrogante con él.
A sus diecisiete años, Alex se ha adaptado a más lugares de los que cualquier chica de su edad podría. Y aún así, actúa como cualquier adolescente normal, y su vida va bien, sin problemas a los que esta acostumbrada y sin tener que huir de nuevo. Hasta que llega el chico malo de la escuela.
Alex había visto chicos malos toda su vida, chicos tatuados, chicos que golpeaban, que fumaban, metidos en la mafia, que amenazaban o que simplemente no querían a nadie en su vida. Pero luego estaba Luke Hemmings. Era un chico con apariencia de ángel, a pesar de la ropa negra y rota, cabello despeinado y piercings en su labio y ceja, tenía una chispa de esperanza en sus brillantes y grandes ojos azules. Pero siempre trataba de ocultar esa chispa bajo lentes negros o cualquier cosa que pudiera cubrir sus ojos. Pero Alex los había visto y aún así, seguía escondiendose de él, a pesar de que sabía que el era muy diferente a los demás.
Pero ninguno se iba a rendir con su propósito. Luke no iba dejar ir a Alex sin saber por qué huye de él. Y Alex no iba a dejarlo entrar a su vida. ¿Quién ganará? ¿Quién perderá? ¿Por qué ninguno de los dos logra dejar de pensar en un futuro juntos? ¿Por qué tienen tanto miedo de estar juntos?
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My Disaster
Teen FictionLuke y Alex son el típico cliché, solo que no como lo piensas.