❝ Ghost of the Virgin ❞ JENMIN

Capítulo 2: Besos sabor sangre

La luna en el punto hacía que la tensión de aquella habitación incrementará de una manera que ambos estaban urgidos por más.

Los llamativos y muertos ojos de Jimin hacían delirar a Jennie queriendo qué la distancia fuera cada vez menos; la respiración de ambos se empezaban a mezclar, las manos no se quedaban quietas. La cintura de Jennie fue sujetada y la distancia empezó a ser nula.

Aquel toqué de labios fue lo mejor que ambos pudieron experimentar se movían lento queriendo disfrutar del otro, rodeando el cuello del más alto el beso se empezó a intensificar más y más.

Una cosa qué no saben de mí  es qué amo los besos con mordida ya qué me hacen desear más y claro esta no era la excepción, sus grandes manos exploraban mi cuerpo sin parar apretando mis glúteos a su paso juntandome a su cuerpo sintiendo aquella erección qué empezaba a ser molesta para el.

Mi ropa interior empezó a mojarse esto era nuevo para mí nunca había experimentado tales cosas mi respiración pesaba, el agarro mis glúteos y me cargó para después colocarme encima del escritorio de mi padre colocándose en medio de mis piernas.

Sus besos fueron bajando por mi cuello succionando a su paso dejando marcas qué el veía con gozó. ── Jennie Kim estas dispuesta a entregarle a un ser cómo yo tú virginidad ── Preguntó con una voz ronca mientras me embistió en falso haciendo que soltara un pequeño gemido, el cuál disfruto ya qué me recostó en el escritorio y embestía en falso sin parar cada vez más fuerte, sintiendo su gran erección frotarse con mi intimidad.

Su cabeza estaba escondida en mi cuello mientras seguía embistiendo y Mierda! se siente muy bien poco a poco empece a soltar suaves gemidos, en esos momentos no podía pensar con claridad estaba concentrada en el roce tan delicioso que empezaba a enloquecerme cada vez más.

── S-si, S-si pero...mgh.

──¿Pero qué linda?. ── cuestionó para después parar sus movimientos y observarme detenidamente.

── ¿Qué eres?. ── Pregunté mientras sentía toda la humedad entre mis piernas.

Jimin sólo agacho la cabeza soltando una risa muy coqueta a mi parecer
── Soy un súcubo.

── ¿Súcubo? ¿Qué son?.

── Un súcubo corazón es un demonio que ofrece el mejor placer a cualquier mundano qué requiera de una buena ronda de sexo sin control...-sujeto mis muñecas arriba de mi cabeza- sin reglas, duro y sin escrúpulos...- con su mano libre fue recorriendo mi pierna subiendo hasta llegar a mi muslo apretándolo muy fuerte- cualquier fantasía qué tengas te será cumplida eso es un súcubo.

No dijo nada más y empezó a besarme de nuevo esta vez era un beso muy apasionado el se quito su camisa mostrando su fornido pecho y con eso quede encantada.

No podía pensar con claridad cada vez la adrenalina y la excitación aumentaban, Jimin jalo de mi vestido rompiéndolo dejándome expuesta sólo con ropa interior.

Mis mejillas se coloraron nunca antes me había expuesto de esa manera ante un hombre el continuó besándome.

── Ahh!!. ── gritó separándose de golpe de mí, empezó a tocarse la cabeza  tropezó con los asientos del estudio casi iba a caer pero lo sujete antes de qué lo hiciera.

── ¿Qué sucede?!. ── pregunte muy asustada.

── N-no puedo hacerlo.  ── Dijo mientras se tocaba la cabeza una y otra vez sin parar ── Mi otro yo a lo mejor y si podrá complacerte.