Capítulo 34

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Hola, abajo esta el capítulo. Perdón por la demora pero soy de de Chile. Y estos últimos días son una pesadilla para mi y para el país pero también una protesta por todas las injusticias que hay en este país. Ayer no publique porque por primera vez en toda mi vida RECORRÍ TODA LA CIUDAD BUSCANDO ALIMENTO, cuando antes iba al supermercado y compraba pero ahora todo estaba desabastecido. No había nada, habían filas y saqueos.

También todas las noches hay disparos y nunca en mi vida había escuchado uno y es horrible. Y eso empezó por algo tan pequeño pero ahora se volvió una lucha social.

Les mando la foto para explicar. Y las personas que me trataron de mentirosa.  Chicas  antes de decir eso tienes que preguntar y no juzgar. Hay que sentir empata, tenemos que crear una mejor sociedad. Gracias.

 Gracias

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Capitulo 34

—¿Tú que haces por aquí?— inquiero todavía sin poder creer.

Afrodita me mira con la ceja adelantada, creo que me expresé mal.

—Primero se saluda mortal, después se pregunta. –me regaña como madre— No puedo creer que no te mate cuando me hablaste así, debes tener consideración.

No hago ademan de regruñir, vaya que simpática.

—Lo siento ¿A qué se debe su visita?

—Te perdono esa falta grave mortal.

—Ehhh...supongo que digo que si.— respondo sin ganas de pelear— ¿A qué se debe su visita?

—Pero busco a mi hijo.

—Pues aquí no está. –respondo suavemente. Veo su cara y recuerdo a Cupido por sus facciones, son idénticos físicamente. Pero no psicológicamente y eso lo percibí, él es de otra manera, es más humano. Es más real, él sabe lo que pasa en el mundo, el conoce la gente a pesar que es más especial.

Estoy totalmente enamorada de él

Afrodita me mira con duda, como prensando que va a decir y como yo responderé.

—¿Dónde se encuentra?—pregunta tratando de sonar que desinteresada.

—Está en la guerra—murmuro

—Oh no—suspira tomándose las manos con nervios— ¿Y cómo paso esto? ¿Cómo Apolo pudo llegar con él?

—Apolo lo amenazó con dañarla más a usted y a todo los que quería. El decidió aceptar el combate. Hace cuatro semanas ha estado fuera. No sé cómo ni dónde están, pero es una guerra.

—Maldito Apolo—con un rechinar de sus dedos siento que para todo— Tenemos que ir y para esto. Ellos pelearan hasta el cansancio.

Un miedo dentro de mí y al parecer Afrodita se da cuenta. Con una ceja levantada, se ríe.

Cupido, estás despedido #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora