1. El Desligue

181 28 7
                                    

   

            No podía evitar notar que en esa mesa, había algo fuera de lo común. Y no se trataba precisamente de lo incómodos que nos sentíamos con mi ex-mejor amigo Kim Jiwon;con el cual debía convivir porque recientemente a nuestros padres se les había ocurrido empezar a salir; no, él emitía un aura extraña. ¿Estrés? No.

—Junhoe, ¿vas a comerte eso?—. Mi madre preguntó, señalando con sus palillos un pedazo de carne que había dejado apartado en mi plato, la ignoré, aún tratando de descifrar el misterio.

            ¿Cansancio? No. ¿Miedo? ¡Era miedo!

—¡Tú!—. Me levanté de golpe, azotando la mesa con mis manos. Todos se sobresaltaron, en especial él.

   Rodeé la mesa, él empezó a temblar, levanté su cabeza enredando sus rizos entre mis dedos, obligándolo a mirarme.
—¿Quién?—. Interrogué, furioso.
—No sé de qué est...
—¿¡Con quién te acostaste!?

              Era poco común una amistad entre dos dominatur precisamente por eso. Pero Jiwon no era posesivo, por lo que muchas veces me pregunté, ¿por qué él era uno de nosotros?

              Oí el sonido de dos sillas arrastrándose por el suelo, mi madre suspiró y salió. Su padre nos observaba de lejos, por si debía intervenir en algún momento.

            Jiwon seguía sentado, sin reaccionar en contra mía. Bajé su cabeza para ver la parte dorsal de su cuello. Una equis negra.
  
            El carácter de Jiwon daba para tener apenas dos parejas, ¿quién podía ser lo suficientemente necia para eliminar en él la posibilidad de tener a otra pareja?
   Pensé en las tres chicas que salían conmigo, ninguna. Solo quedaba...

—¿Donghyuk?

           Mi capacidad alcanzaba a siete parejas, pero Donghyuk era un chico tan dulce y a la vez tan testarudo que también me había restado la posibilidad de tener siete y solo podía tener seis. Pero...

           Solté el agarre, mis nudillos estaban blancos por la fuerza con que cerraba mis puños. Donghyuk era leal.

—Lo quería para mí desde que lo conocí, pero ya estaba contigo—. Comenzó a hablar.

         Calculé el tiempo de nuestra relación. Y todo tuvo sentido, al fin tenía una razón lógica para lo que me había hecho tiempo atrás, algo tan despreciable que rompió nuestra amistad.

 —¿Fue por eso que me hiciste perder el campeonato hace dos años? ¿Fue por eso que me saboteaste?

           Oí a su padre suspirar, entonces nos dejó a solas, tal vez creyendo que su hijo se merecía la paliza que anteriormente planeaba impedir.
  
—En ese entonces él era tu favorito, siempre estaban juntos y yo detestaba  verlos así, a donde fuera que íbamos tú lo llevabas y yo soportaba el impulso de saltarte encima y golpearte. Por eso yo... Preferí que te alejaras de mí para siempre.

—¿Tenías que arruinar mi sueño para ello?
—Cualquier otra cosa que hubiera hecho no habría sido suficiente para alejarte.

   Quería matarlo. Descargué mi furia arrojando la silla vacía a su lado contra la pared.
—Sal de mi vista—. Le ordené con voz ronca, él obedeció.

            Luego de intentar calmarme sin éxito, volví a sentarme en mi lugar, dispuesto a relajarme con el delicioso pedazo de carne que había dejado para el último. Pero este no estaba, y terminé por explotar.
—¡Joder!

           Podría decirse que remodelé el comedor. Normalmente los dominatur sentíamos ira cuando se nos arrebataba a la fuerza una pareja, Donghyuk valía por dos.

Dominatur {Junhwan} TS1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora