La música une a dos almas

7- Queen

Habían pasado algunos días desde que Daniela se fue, estaban siendo difíciles ya que en unos días ya me había acostumbrado a estar con ella.

Hoy era el día en que mi papá cogía su vuelo para ir a Bogotá a jugar el torneo, le pregunté si podía ir con él, me sorprendió que aceptara mi propuesta, le pareció raro ya que a mi nunca me había aficionado el golf, ni siquiera me terminaba de gustar del todo, me parecía un deporte aburrido.

Dejamos a Vale y Sebas solos en la casa, y nos dirigimos al aeropuerto, con destino a Bogotá. Ibamos conversando de varios temas hasta que llegamos al avión. Traté de dormir unas cuantas horas, perp el esfuerzo fue en vano, no podía sacarme de la cabeza a Daniela, todo era una sorpresa para ella, es más, Calle pensaba que Poché estaría durmiendo en su cama, ya en el tercer sueño. Poché tenía nervios de cómo Calle iba a reaccionar ya que fue todo muy improvisado. Quedaba 1:30h para que el avión llegará a su destino, en esas Juan Carlos se despertó y vio a Poché muy pensativa observando ñas nubes desde la ventana, se atrevió a preguntar.

-¿Es por Daniela?-Poché se sobresaltó.
-Qué susto, no me di cuenta que te habías despertado.- Dijo evadiendo la pregunta anterior.
-Sí, no respondiste.- En ese momento Poché bajó la mirada hsta sus zapatos y en un hilo de voz casi inaudible dijo algo parecido a un "sí".
-Me di cuenta.- Poché miró rápidamente a los ojos del hombre. - Pues, tendría que ser tonto si no me doy cuenta que mi hija anda chateando con alguien 24/7.- Terminó de explicar Juan carlos con una sonrisa, Poché lo acompañó en ella.
-Sí, me gusta.- Dijo la peli azulada susurrando.
-Tu sabes que yo siempre he querido lo mejor para ti, no importa si estás con un hombre o con una mujer, solo espero que ella sea la indicada y que te haga bien, que te convierta en la mejor versión de ti misma y que solo te hag sonreír, no quiero que te lastime.- Esas palabras le salieron del fondo del corazón, Poché no sabía que decir, solo lloró y lo abrazó fuerte durante unos minutos hast que se convenció de decirle y explicarle lo que estaba pasando con Calle.
-Entonces viniste conmigo para ver a Calle?- preguntó el hombre y Poché asintió.
-Yo pensé que era porque mi hija quería verme ganar el torneo mundial de golf.- Fingió llorar, Poché rió. Sin duda Juan Carlos sabía cómo ponerle humor a la situación.

A todo esto, ya habían llegado al hotel y eran las 10 p.m.
La habitación era muy grande, era una suite con un ventanal enorme que daba vistas de toda la ciudad, había un pequeño jacuzzi , muchos cuadros de pintores internacionales, algunos más conocidos que otros, un balcón que se veía la piscina iluminada del hotel.
Pedimos room service para cenar, mientras nos lo traían, aproveché y le envié un mensaje a Calle ara saber si mañana iría con su papá al golf, me contestó de inmediato con un sí, y preguntando el porqué había madrugado tanto, tuve que decir una mentirijilla para que no sospechase de mi sorpresa, así que le dije que tenía que acompañar a Vale al colegio, ya que mi papá no estaba en la casa, se la creyó y me dijo que ya iría a dormir, le mandé dulces sueños y justo tocaron el timbre, era la comida.

Comimos todo rapidísimo y fuimos a dormir, el partido empezaba a las 12 del mediodía, pero teníamos que estar una hora antes para arreglar todo el campo.

Sonó la alarma: 10:15, me gustaba dormir mucho así que me puse la alarma justa, pero me daba el tiempo justo si me apresuraba, entré a la ducha, me bañé rápido, me maquillé, me vestí simple, el outfit consistía de: una camiseta blanca con las letras "Queen", unos jeans azules claritos y las huarache.

Terminé al mismo tiempo que mi papá y salimos de la habitación, 10:40, en la entrada del hotel ya había una furgoneta esperando para llevarnos al campo. Era una furgoneta Mercedes, de último modelo, negra con los cristales teñidos para que no se viera el interior.

Tardamos 10 minutos en llegar, nos bajamos y no encontramos a nadie, sólo la chica de recepción, me pareció extraño, así que fuimos a preguntar, nos dijo que ya todo estaba preparado y que Germán se encontraba dentro del establecimiento, entramos y vi al amor de mi vida, preparada para darle a la pelota con el palo de golf, le dio, la pelota entró al hoyo, quedé anonadada. Nos acercamos y cuando nuestras miradas se cruzaron sentí que me faltaba el aire para respirar.
Nuestro papás se saludaron y nosotras nos quedamos estáticas mirándonos fijamente, parecía que el mundo se había detenido, y solo existíamos nostras: Calle y Poché

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Holaaaa
Espero les esté gustando el fanfic
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Nos leemos en el siguiente capitulo.

Besos 😘