A la mañana siguiente en la fábrica...
Eduardo: Buenos dias!!
Esteban: Buenos dias a los dos, que alegría que estés aqui Erika.
Erika: Gracias Esteban, estoy un poco nerviosa.
Eduardo: No lo estés mi amor, todo ira bien, además tu aprendes rápido (haciéndole un guiño).
Erika: Eduardoooo!! (sonrojada).
Esteban: Yo ya me voy a mi oficina, tú Erika tendrás tu escritorio aqui en la oficina de Eduardo.
Eduardo: No queria tenerte lejos amor.
Erika: Pero no quiero que te distraigas eh, vamos a trabajar okey?
Eduardo: Si señora, pero igual no prometo nada.
Esteban: Vamos a que conozcas a los empleados.
Erika: Vamos.
Eduardo: Buenos dias a todos, quiero presentarles a Erika, ella va a encargarse de sus sueldos y los problemas que ustedes tengan.
Erika: Hola a todos.
Empleados: Buenos dias.
Empleado 1: Es hermosa (en voz baja).
Empleado 2: Sshh, si lo es pero de seguro es la novia del jefe.
Eduardo: Ella además es mi mujer y quiero que la traten bien y la respeten por favor.
Empleado 2: Te lo dije (en voz baja).
Erika: Solo quiero que me traten como a una mas de ustedes y que confíen en mi, haré todo lo posible por hacer las cosas bien.
Eduardo: Lo harás amor (abrazándola por la espalda).
Esteban: Les prometo que ella es la indicada para esto y que no se van a arrepentir.
Erika: Gracias Esteban y lo que necesiten estoy en la oficina de Eduardo.
Empleados: Gracias!!
Empleado 1: Adiós hermosa (en voz baja).
Empleado 2: Yaaa!!! Si te escucha el jefe te echa.
En la oficina...
Erika estaba ordenando unos papeles y Eduardo no dejaba de mirarla...
Erika: Amor, se te atrasara el trabajo asi (riendo).
Eduardo: Es que es imposible tenerte aqui y no verte.
Erika: Si quieres me cambio de oficina.
Eduardo: Nooo!! Te quiero aqui conmigo, esta bien prometo consentrarme.
Esteban entrando...
Esteban: Uy ya ni reconozco ese escritorio, tan ordenado y los papeles y carpetas en orden, no te vayas nunca Erika.
Erika: Habia mucho desorden, no se como hacían para encontrar algo aqui.
Eduardo: Simplemente no encontrábamos nada (riendo).
Esteban: Pero gracias a Dios apareciste.
Eduardo: Gracias amor.
Erika: Gracias a ustedes por el trabajo y por confiar en mi.
Eduardo: Porque no vamos a comer algo?
Esteban: Vayan ustedes, yo quede de almorzar con Adriana.
Eduardo: Ay hermano, veo que va muy bien eso eh.
Erika: Esteban, me alegra mucho que se estén entendiendo, se que eres muy buena persona y mi hermana necesitaba amor, amor de un hombre.
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Mi destino, tú
RomanceA veces nos parece que nada cambiará, pero el destino nos tiene preparado una sorpresa y puede estar a la vuelta de la esquina...