CAPÍTULO 2

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La luz que había detrás de ella hacía que pareciera un ángel, y creo realmente que si lo es. Tenía el pelo negro, ojos demasiado oscuros, vestía de falda, una blusa y unas botas que la hacían ver alta, llegando a mi estatura.

— ¡Hola! — Me saludó efusivamente mientras hacía una pequeña reverencia. –Disculpa si te asusté, sólo quería venir a observar el lugar. Por cierto, ¿esa canción es “Yellow” de Coldplay? – Se notaba que hacía un gran esfuerzo para pronunciar las palabras en inglés. Me reí un poco, espero que no se lo tome a mal.

— Si, esa es. Lo quise poner porque es una canción que me gusta mucho y… –Me di cuenta que estaba hablando de más, no creo que le interesara mucho mi vida personal. Ella se dio cuenta de que paré y respetó eso.

— Está bien. Como dije, sólo quería observar el lugar, me trae muchos recuerdos de mi niñez. Es un lugar cálido… – Expresó con su voz agradable mientras miraba las máquinas. – Me iré, supongo que ya vas a terminar tu turno y te estoy reteniendo. ¡Hasta luego! – Sonrío, hizo una pequeña reverencia la cual respondí y salió por la puerta.

Me sentía desconcertada por esa conversación tan corta que tuvimos. Ni siquiera pude saber su nombre, y quise salir y preguntaselo pero me quedé paralizada mientras sonaba “The Reason” de Hoobastank en la sala, procesando lo que había pasado. Salí de inmediato a la calle y la chica no estaba.
Realmente espero verla de nuevo, algún día.

Entré de nuevo al local y limpié el piso con la trapeadora. La música ya no estaba, tal vez paró por algún anuncio de Youtube. Sentía que mi mente se había ido de viaje con la chica que vino hace unos instantes. Era demasiado hermosa…

Terminé de limpiar, apagué las maquinas, tomé las cosas de mi casillero y salí del local, no sin antes cerrar. Caminé hacia mi casa que no eran más de 5 cuadras del local, y en todo el camino no dejaba de pensar en el rostro de aquella chica. Tardé 10 minutos en llegar a mi casa, tomé las llaves que había guardado en mi mochila y entré a mi casa.

Casi vivía sola, mis padres estaban en sus empresas o bebiendo y casi siempre llegaban entre la una y tres de la mañana. Ya me había acostumbrado: a veces peleaban, otras veces follaban como si no hubiera mañana. Yo me levantaba a las cinco de la mañana para poder ir a la escuela temprano, así que casi no nos veíamos excepto por los fines de semana. Esos dos días la pasamos en familia, o si cada uno quiere darse su espacio, lo debe avisar desde antes. Es una regla para nosotros.

Abrí el refrigerador para sacar la pasta que había hecho para mi almuerzo. La calenté, comí y me fui a dormir… Cosa que no hice de inmediato por estar pensando en esa chica. No entiendo por qué no dejo de pensar en ella y su hermosa cara. He visto chicos y chicas en el local, hasta hemos conversado, pero jamás había tenido esa sensación de querer conocerlos a fondo, o saber por lo menos sus nombres. Esta chica me dejó intrigada, así que tomé mi celular para contarle lo que había sucedido.


Mensaje de texto:

[9:15 pm] Lisa: “¡Hola dulzura! ¿Ya llegaste del trabajo? Me preocupa cuando no me hablas y lo sabes. Espero que estés bien.”

[10:04 pm] Chaeyoung: “Hola hermosa. Si, ya llegué. Me demoré un poco en responder porque debía comer, lo siento. ¡Gracias por las frituras y el jugo! Salvaste mi vida.”

[10:06 pm] Chaeyoung: “Hoy ha pasado algo extraño en mi turno…”

[10:07 pm] Lisa: “¿Qué ha pasado? ¿estás bien?”

[10:07 pm] Chaeyoung: ”Si, estoy bien, no te preocupes. Solo que entró una chica muy linda cuando estaba a punto de cerrar. Es de nuestra edad, o tal vez unos años mayor. Tenía el pelo negro, ojos oscuros… ¿Alguna vez la haz visto en tu turno?”

Lisa y yo pocas veces teníamos turnos juntas, y si eso pasaba era en los días donde había más gente, lo que significaba que habría más cambio de monedas para las maquinas, más supervisión y más limpieza. Además, hay una pequeña sala para leer si la persona desea, así que pueden traer su propio libro o nosotros podemos prestarle mangas o libros a la persona, con un pequeño costo, por supuesto. Así que por eso eran mejor dos personas que una sola en los turnos pesados, que usualmente eran los martes y los viernes.

Todos los martes y viernes nos veíamos, además de vernos en la escuela. Los lunes trabaja y jueves ella trabajaba sola, los miércoles era mi día de trabajar sola. Ella recibía un mejor sueldo que yo, puesto que trabaja un día más. Los fines de semana ninguna de las dos trabaja, el jefe tenía a otras dos personas para trabajar. En casos extraordinarios, como que a una persona del fin de semana le sucedió algo, el jefe llama alguna de nosotras para trabajar.

[10:09 pm] Lisa: “Nop, no la he visto jamás. Tal vez sea de esos clientes que van a ver la sala y nunca vuelven, es todo.”

[10:10 pm] Lisa: “Hey, Chae. Debo irme a dormir, si no, mañana dormiré como marmota. Espero que tú puedas dormir, descansa y dulces sueños :*”

[10:11 pm] Chaeyoung: “También me iré a dormir. Dulces sueños <3”


Dejé mi celular en la mesa de noche que tenía al lado de mi cama y cerré mis ojos. Este era mi segundo intento para dormir esta noche y pude lograrlo finalmente.

Vi a la chica misteriosa en mis sueños.

Estábamos en la sala y jugábamos en las maquinas. Era de noche. Aún no sabía su nombre, la miré, le pregunté y ella abrió su boca para decírmelo…

Hasta que sonó la alarma del despertador.

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