[Perspectiva de Kim Jisoo. Miércoles, 8 de la mañana. Casa de Park Chaeyoung]
Tuve una plácida noche en mi cama. Ha sido la primera vez en muchas noches que duermo tan increíblemente bien. Estiro mis brazos y piernas en toda la cama mientras abrazo los ojos y miro el techo mientras sonrío al sentir tanta satisfacción.
El problema es que no es mi cama. Ni siquiera es mi casa.
Levanto la mitad de mi cuerpo para observar la habitación, pero al hacer este movimiento tan rápido, mi cabeza da vueltas y debo sostenerla por un rato. Cuando el mareo para, volteo por todas partes a observar de nuevo, y me doy cuenta que es la habitación de Chaeyoung, por las fotos que tiene con su amiga peli-zanahoria y sus fotos de pequeña que causan ternura. No ha cambiado nada, sigue teniendo sus mejillas de ardilla que dan ganas de besar y su sonrisa cautivadora que hace que sus ojos se entrecierren. Sonrío al ver esas dulces fotos y me dispongo a caminar por la habitación.
Realmente no recuerdo mucho de lo que pasó ayer antes de llegar. Y después de esto, sólo recuerdo fragmentos. Toco mi cara para sentir mi temperatura corporal. Estaré a unos 34 centígrados, más o menos. He tenido fiebre cuando llevo mucho estrés, supongo que eso sucedió ayer y terminé en este lugar. Pude ir a la casa de Jennie, pero inevitablemente estoy en la casa de Chaeyoung.
Por cierto, ¿dónde está ella? Tal vez está en la cocina, ya que la habitación se envuelve en un olor de comida deliciosa que proviene de afuera. Antes de salir, me miro en el espejo y veo los pequeños moretones que tengo en el rostro, los cuales ya están desapareciendo de a poco. ¿Así me vio ella ayer? Qué vergüenza.
Sin embargo, siento más vergüenza al recordar que estuve a punto de darle un beso a la linda chica que me ofreció un lugar en su cama, y no pude hacerlo por una llamada de su celular. Tapo mi rostro al sentir que arde. ¿Por qué siempre deben interrumpir momentos así? Deseaba tanto besarla.
Abro la puerta de la habitación para salir y me dirijo a la cocina. Si está de espaldas, voy a abrazarla así para agradecerle. Sí no, igual la abrazaré pero le daré un beso. Sí, es un gran plan.
Sin embargo, cuando llego a la cocina, encuentro un cuerpo alto y masculino, con cabello castaño, dando la espalda mientras prepara algo. Antes de poder gritar o hacer algo, me tapo la boca con la mano derecha y salgo corriendo hasta la habitación de Chae y cierro la puerta lo más silenciosamente posible, me recuesto en ella y me deslizo hasta sentarme en el piso sin dejar de taparme.
Al parecer no fui lo suficientemente silenciosa, ya que escucho pasos viniendo a la habitación y alguien detrás de la puerta toca con delicadeza.
– Chaeyoung, linda, ¿estás despierta? – Escucho la voz de una mujer adulta, posiblemente es su madre. Chaeyoung dijo que sus padres no estaban mucho en casa, ¿qué hacen aquí entonces? – Quisimos darnos un día de descanso diferente, queríamos pasar tiempo con nuestra querida pequeña. ¿Por qué no sales a saludar? – Dice mientras mueve la perilla de la puerta. Mierda.
Mierda, mierda y mil mierda más. ¿Qué hago ahora? No hay ninguna ventana por la cuál pueda salir, tampoco puedo esconderme toda la vida, ya saben que hay alguien aquí. Y por cierto, ¿dónde mierda está Chaeyoung? ¿me dejó sola en su casa de nuevo? Bueno, no tan sola ahora, pero es aún más incómodo estar en la casa con sus padres que estar sola.
Maldita sea el día que mi madre rompió mi teléfono. No puedo llamarle e insultarla por dejarme en su casa. De nuevo me pregunto, ¿qué hago ahora?
No tengo más remedio que levantarme y poco a poco tocar la perilla para enfrentar a su familia.
Cuando abro, observo a una linda señora castaña con mejillas un poco abultadas, pero con la edad se le han estado cayendo. Parece la viva imagen de Chaeyoung más adulta, pero claramente prefiero a mi Chaeyoung. La sonrisa es similar, la cual la sostiene hasta que mira el rostro desconocido que está frente a ella llamado Kim Jisoo. Su expresión cae y cambia para una de sorpresa y susto.
ESTÁS LEYENDO
• ARCADE • Chaesoo
Storie d'amoreRuidos y diversión en un solo lugar. La risa de los niños es agradable. La comida de la maquina expendedora es deliciosa. Pero todo era tan monótono. Escuela, trabajo, casa. Esa rutina se repite todos los días, no había nada emocionante en mi vida...