𝔽𝕣𝕚́𝕒 𝕔𝕠𝕞𝕠 𝕖𝕝 𝕙𝕚𝕖𝕝𝕠 ❆╎𝒇𝒍𝒐𝒓𝒂 & 𝒉𝒆𝒍𝒊𝒂.

Capítulo XIII: Paseo/¿Qué es compra?

Miró de nuevo el reloj en la pared y después a su hermano. Llevaba una hora ahí y ya quería que Nightly despertase para irse a casa junto a su madre.

-... Y le dije que no combinaban las zapatillas. Íbamos a un baile, no a un campeonato de soccer -escucha una voz.

No otra vez con ellos.

Recostó su cabeza en la camilla sin dejar de sujetar la mano de su hermano. La puerta se abrió y por ella apareció el grupo de amigos, riéndose ligeramente por el chiste recién contado de la rubia.

-¿Cómo está Nightly? -pregunta Bloom.

-Sigue sin despertar -murmuró triste.

-Vamos alteza, estamos todos aquí para apoyarla. Su hermano se podrá bien -Layla se acercó a ella y le acarició su cabellera larga -. Debe estar cansada. ¿Qué le parece si vamos a relajarnos un poco?

Los demás chicos asesinaron a la morena con la mirada. Se suponía que ese no era el plan. La más pequeña suspiró y regresó su vista a su hermano. La chica tenía razón, pese a que estaba preocupada por ello, también tenía derecho a descansar un poco.

Tal vez... Y sólo tal vez, ellos no sean tan malos como creí, y la Tierra sea un lugar más relajado.

Se levantó, sacudió un poco sus ropas y le dio un pequeña (casi visible) sonrisa a la rizada.

-¿Por dónde comenzamos el Tour?

[•••]

-Entonces esto es un... ¿Helado? -pregunta ella, mirando con curiosidad el vaso.

-Es un frappé en realidad, no lo beba tan deprisa si no quiere...

-¡Riven! Maldito, deja... ¡De comerte mi helado! -Brandon y Riven corrían de un lado a otro mientras los demás estaban en una mesa grande afuera de un local de helados y frappes.

-Ammm... Su amigo -señaló con la pajilla al chico de cabello púrpura -. ¿También se comerá mi frappé?

-No, majestad. Me encargo yop de vigilarlo-sonrió Musa.

-¿Decías... Ammm?

-Helia. No lo beba tan rápido si no quiere un dolor de cabeza -suspiró. La chica casi se aprendía el nombre de cada uno de los integrantes, al menos ya no se confundía con Layla, Bloom y Stella, lo cual era un avance para ella.

-Entonces, se coloca la pajilla, así -introduce la pajilla en la bebida -, ¿y nada más lo bebo?

Los presentes asintieron, llevaban ya diez minutos explicándole que era cada cosa, ya que en su mundo no había tal cosa por lo que les comentó. Helia la miró, seguía igual de hermosa que siempre, tan linda y curiosa, fuerte, hermosa, cálida con algo de frialdad, perfecta... ¿Ya les había dicho que luce hermosa?

Parece una niña de cinco años.

Pensó con cariño. La miro con cariño. Ante sus ojos estaba el ser más perfecto del lugar mágico y de las dimensiones mágicas que él había explorado. ¡Pero que imbécil había sido por prestarle atención a su mejor amiga que a su (ahora) ex novia! Flora y Star eran diferentes personas en una misma... ¿Cómo haría para tener un rato con ella sin que Star lo tratara con frialdad pura?

-Sabe.. -el murmullo de su pequeña lo sacó de sus pensamientos -. Es... Aceptable.

Y ahí estaba otra vez, su carácter de "princesa-heredera" había vuelto. Ella no era una princesa... Bueno, ante sus ojos sí, pero en el mundo no lo era, no tenía obligaciones, no tenía carácter, simplemente no era ella misma. Star era como una máscara, una que él deseaba arrancar con todo su corazón para liberar a la mujer que realmente ama como un loco.

-¿Le ha gustado? -pregunta Tecna, acurrucada en el pecho de Timmy.

-No es como muy común en mi reino, pero... Me ha gustado. Es dulce, cremoso, y... ¿tiene de esa cosa llamada... Café? -miró atentamente el envase, los presentes (y el no tan presente Brandon, por que sabemos que Riven es un casi insensible sin corazón más que para Musa) murieron de ternura. Star era como una niña curiosa. Y pese a que ya comenzaban a quererla, aún extrañaban a Flora.

-Bueno... ¿Vamos de compra? -pregunta Stella.

-¿Compra? ¿Qué es eso? -miró extrañada a la rubia.

-Hay no... -murmuró el grupo con fastidio, y a Stella le brillaron sus ojos miel.

-Venga conmigo y le mostraré ¡mi mundo! -se levantó, tomó la mano de la chica y comenzó a correr hacía las tiendas de ropa.

-¡Stella! -todos se levantaron inmediatamente para evitar que la chica cometiera una locura.

-Ya... Basta... Se acabó -Brandon llegó echando humo por las orejas a la mesa en la que "estaban" sus amigos. Pero no los vio. Riven llegó a su lado, comiendo la última cucharada del helado de su amigo.

-¿Dónde están? -salió la camarera que había atendido al grupo.

-¿Ustedes pagarán la cuenta? -le sonrió a los dos jóvenes que tenía frente a ella.

Nos quedaremos pobres...

[•••]

-Yo creo que le vendría bien una falda ¿no creen chicas? -las chicas negaron inmediatamente, sabiendo que eso podría molestar a Star.

-No. No lo creo -negó inmediatamente la princesa.

-¿Un vestido, quizá? -pregunta la vendedora.

-Que sea largo -aclara viendo los jeans. El grupo veía a lo lejos la escena, para Stella era una total pesadilla y en algún momento se largaría llorando si la chica continuaba viendo los horripilantes jeans y eligiendo blusas de manga larga. ¿Qué pasó con las faldas, top's, short's y tacones? Necesitaba a su Flora aunque ella se hartara de tener que acompañarla de compras... Al menos era mejor que la elección de compra de Star.

-Creo que esto no está tan bien, ¿verdad amor? -le susurra Brandon. Ella asiente estando de acuerdo.

-¿Por qué no mejor le ayudamos en lugar de quedarnos como estatuas? -pregunta Riven.

-¿Y si se molesta?

-La compensamos con un helado... ¡Auch! -Musa le dio un zape.

-Podríamos hacer el intento -el grupo empezó a ver algunas prendas (más las chicas por que los chicos eran un caos en eso) de ropa y creando conjuntos para la princesa.

-¡Wow! Stella, es hermoso -Star se acercó a la princesa para ver el conjunto que creo con algunas prendas: una falda de color negro con un top palo de rosa y tacones del mismo color.

-Quedaría bien en usted, se lo digo por ser una profesional en la moda -agrega con orgullo.

-¿Crees que pueda..? -susurra tímida mirando el conjunto frente a ella.

-¡Por supuesto! -la chica sonríe, Star toma las prendas y va al vestidor.

-¿Cómo hiciste eso? -pregunta Helia asombrado.

-Una maga de la moda jamás revela sus secretos, querido Helia.

Salió a los cinco minutos, y para el grupo era como una luz radiante, tan linda, hermosa y sensual, algunas chicas quedaron impactadas por su belleza, mientras otros chicos casi se les escurría la baba por la pequeña. Una Diosa ante sus ojos.

-¿Qué... Opinan? -pregunta mientras se pone un mechón de cabello en su oreja, totalmente tímida por todas las miradas de la tienda.

–¡Ay, no! ¡ES MI MEJOR CREACIÓN! -chilló Stella emocionada -. ¡Debemos pagar esto! -y arrastró consigo a la princesa ahora a la caja mientras ella soltaba un risa. Una verdadera risa.

❤ This is Halloween ✨