Al llegar al hospital nos estacionamos enseguida y nos bajamos los tres, mientras se me reprocha porque soy el más que me tardó en bajarse. Caminamos lento, pero rápido, silentes y animados, con pasos que penetran la cosa más dura de la tierra, menos el espíritu.
Llegamos a un sexto piso. Nos ponemos de acuerdo en entrar. Para poder estar en el cuarto debíamos ponernos batas, guantes y mascarillas, luego de lavarnos las manos particularmente. Como era un proceso de higiene muy cuidadoso, decido esperar que pase la alergia que tenía -mucha- para poder entrar y no contaminar nada. Es en este momento que decido volver a nuestros mensajes.
Me voy percatado poco a poco que nuestro amor siempre ha sido de niños, de adolecentes controlados y de pasión con mucho dolor e inocencia. Algo puro, no menos pasión tímida, sonrisas y retos. Me encontré con una de sus notas, la ocurrencia de una niña y el mensaje de hace unos años de una mujer:
"...cuando quieras conectarte!!
Una niña perdida entre dolores e injusticias, quien en medio de todo también falló, y en el intento de levantarse encontró -o más bien se fijó- en él, siempre constante. Fue creciendo aun así con corazón de niña, con la ilusión y esperanza de lo creído. Siempre vacila en su caminar pero no teme porque tiene una mano siempre constante. Un día en los que la mente va volando, caminando en la imaginación sin esperar nada solo vivir, encontró algo. Algo inesperado, inoportuno, pero tan indicado. Aun sigue caminando y creciendo la niña, pero con más razones de vivir, y más que todo, el indicado la lleva a conocer más y la lleva al principio y final de todo, al infinito, al siempre constante.
==Hermoso, esta tal vez sea una de las razones por las que te amo. Gracias porque cuando estoy perdida me llevas a casa. Te amo y por más difícil que sea, tú seguirás siendo mi inspiración. Sere yo la tuya?
Besos y Abrazos....
Dios te ama! "También encontré un adiós amargo y lleno de lágrimas en aquel día:
"Bueno...Ya que casi ni hablo con usted! Queria decirle que me voy pal retiro, voy a hacer las maletas ahora, pero no me queria ir sin antes ecribirte que te amo y te extra~o demasiado. Este fin de semana no voy a poder hablar contigo pero se que estaras bien presente en mi mente. Espero que tu puedas estar super bien. Yo pienso que te esta saliendo todo mucho mejor sin mi, pero se que te molestaria si te lo dijera asi que te lo escribo 😊 Emmmm...nada espero que Dios me hable este fin de semana, sera un fin de semana de muchas desiciones definitivas en mi vida. Cuidese y me niego a creer que todo lo escrito en papel y en mi corazon por tus palabras y hechos hayan sido mentiras. No me sueltes si es cierto lo que creo. Bye y buen fin de semana."
Seguido de mi:
"Me quieres a abandonar!!!! ; ( "Es en este preciso instante, mientras espero que vuelva a mi de ese cuarto tan estricto, que mis ojos se llenan de nostalgia, de alegría y de recuerdos. Es muy bueno recordar que este presente no ES en sí mismo; que es producto de la lucha, del trabajo, de la paciencia, del coraje, un camino "hecho al andar". Recuerdo que este amor a matado sesgos, intolerancias, orgullos, voluntades, libertades, ataduras y a admirado cicatrices, las ha contemplado como algo más que trofeos, han sido mapas que nos ubicaron hasta estar juntos.
Al fin sale del cuarto exigente. Le mostré parte de nuestros mensajes. Dice:
Ella- ¿Qué me habrás hecho?"Yo- "¿Yo; que me habrías hecho será? (defendiéndome)
Ella- "no porque aquí (señalando la pantalla) tu pides perdón".
Después del intento de una apología de mi caso no me cuesta más que reír y disfrutar el que me corresponda, aunque la nostalgia no me abandona. Así discutimos el entrar a visitar a Tía. Pasamos la primera puerta. Nos reímos mucho al lavarnos las manos e intentar ponerme la bata con mi cartera y la de ella puestas. Fue un desastre. Para colmo, cuando fuí a poner mi mascarilla comienza el estornudo otra vez. Fue tan corrido como gracioso, así que terminé saludando a Tía de lejos y volviendo a separarnos las dos puertas del cuarto precavido.
Sólo en el pasillo, otra vez, así que me decido escribir. Comienzo con el título, y una línea después: " Ahora, estoy en el pasillo del hospital, el ruido de las ruedas de botes para basura, junto al...". Me muevo del pasillo buscando sentarme.
ESTÁS LEYENDO
Estos días; los pasados, los presentes y los porvenir
RomantizmMemorias de un día en mi mente, mi corazón y un hospital.