El Amor No Es Para Mí

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Pov's Tony

Me encontraba nervioso, emocionado, feliz y ansioso. Toda un combinación de emociones, ¿La razón? Es nuestro aniversario, sí así es, Steve y yo cumpliremos nuestro primer año. Joder,¿Quién no estaría nervioso y emocionado?

Otra razón más en la lista es que mi Pete ya está apunto de graduarse de la preparatoria e ir a la universidad, aún no se decide que universidad escoger, pero no importa cual decida, se que podrá ingresar y graduarse sin problemas.

Aún no podía decidir de que color pintar el regalo de Steve. Las últimas semanas e tratado de que Steve no entre al taller, ya que si entra verá su regalo y todo se podría arruinar.

-¿Viernes ya está todo listo?

- Sí señor, el dueño del lugar aceptó.

-Perfecto- sonríe victorioso- dile a Steve que subiré a la cocina en cinco minutos.

-Claro.

Al llegar, Steve se encontraba cocinando, lo cual ya no era raro, me acerqué y le di un beso en la mejilla.

- ¿Qué cocinas?

-Un poco de pasta con carne.

- ¿Hay algo que no puedas hacer? A veces creo que eres un androide- reí levemente mientras miraba la comida con aún más hambre por la buena pinta que tenía.

- Sabes perfectamente que con la tecnología soy un fracaso- voltea a verme con una sonrisa dulce- en eso te falló.

- Cierto, aún recuerdo tus primeros mensajes, te tomaba diez minutos para enviar un mensaje, ni que decir de los audios- volví a reír al recordar- eres un anciano mi amor

- Pero ya e mejorado- se defendió Steve apuntando con el el cubierto en su mano el teléfono como si fuera una batalla que él ganó contra el celular

- Obvio, ahora sólo te tardas cinco minutos en envíar un mensaje- lo abrase mientras seguía riendo- Por esas pequeñas cosas te amo más

- Entonces no las cambiaré- se acercó para depositar un beso en mis labios

- Me agrada la idea- me separé un poco de sus labios- ¿Tienes planes para mañana?

- Sólo estar contigo

-Perfecto, prepara una maleta con traje de baño y algunas toallas

-¿Eh? ¿Para qué?

- Es una sorpresa

[...]

Nos encontrábamos en mi porche , Steve tenía los ojos vendados, se podría decir que solo era para que tuviera más misterios el asunto.

Al llegar baje del auto, fui al lado del copiloto y le quite la venda a Steve.

- Llegamos- confirme con una sonrisa

- No entiendo, ¿Qué lugar es?

-Toma tu maleta y sígueme- comencé a caminar a la entrada.

Al llegar había una persona esperándonos.

- Todo esta en funcionamiento- confirmó aquél hombre