Tres Veces A Tu Lado

Un Viejo Amigo

La impresión de volverlo a ver fue tan grande, que caí desmayada, él evitó que cayera al suelo.

Todos se alarmaron y buscaron la manera de despertarme

Yo: - abrí los ojos lentamente- ¿qué me pasó?

L: te desmallaste

Alya: Casi no ha comido

L: Estás bien Mary

Yo: Si, Luka, estoy bien

Luka: parece que te sorprendió el hecho de volverme a ver

Yo: sí y mucho, no sabes cuánto te he extrañado - lo abracé -

Luka: yo también te he extrañado mucho - corresponde al abrazo-

-Bajo la lluvia- Alya regresó al hospital con su familia, y Luka me acompañó a casa, pasamos comprando comida a un restaurante.

Cuando llegamos a casa Luka me obligo a ingerir alimentos, ya que no me apetecía nada

Luka: pareces una niña, por favor Mary, hazme caso, come

Yo: no

Luka: Mary por favor, si no lo haces tendré que irme

Yo: bueno está bien, comeré, pero prométeme que no te irás, no quiero quedarme sola ( mis padres se encontraban fuera del país por asuntos laborales)

Cenamos y luego, nos dirigimos a mi habitación, platicamos unos momentos, y cuando me peinaba antes de meterme a la cama, Luka encontró el reloj del desconocido del Café

Luka: qué bonito reloj Mary, es muy antiguo, ¿en dónde lo conseguiste?

Yo: no es mío, es de un desconocido

Luka: ¿De un desconocido?

Le conté la historia y le pregunté qué podría hacer para devolvérselo.

Luka: creo que debes dejar que el destino te dé la oportunidad de encontrarte nuevamente con él, ya que si preguntas de quién es, alguien más podría tratar de engañarte.

Yo: tienes razón, y no me gustaría que algún día lo vuelva a encontrar y que por un error haya perdido un objeto tan valioso.